Buenos Aires.

El presidente de la comisión de Árbitros de la Conmebol, Carlos Alarcón, admitió que los silbantes de la Copa América Chile 2015 han dado lugar a escándalos, pero culpó a los jugadores.

Ellos hicieron todo lo posible para evitarlos, pero ocurrieron porque no hubo cooperación de los futbolistas, sostuvo el dirigente paraguayo en declaraciones a Radio Mitre.

El brasileño Sandro Ricci tuvo una polémica actuación en la victoria de Chile 1-0 ante Uruguay en cuartos de final, partido en el que expulsó a los charrúas Edinson Cavani y Jorge Fucile.

El primero recibió una segunda tarjeta amarilla por pasarle la mano por la cara al defensor Gonzalo Jara, luego de que éste le metió un dedo en el trasero.

Ha sido una Copa muy difícil. Los equipos han estado bastante parejos, trabajaron duro y complicaron mucho la labor de los jueces, dijo el responsable del arbitraje en la Conmebol.

Ricci también tuvo un desempeño polémico en el triunfo de Argentina 1-0 frente a los uruguayos en la fase de grupos, en la que amonestó a seis jugadores, tres de cada equipo.

De su lado, Gerardo Martino, entrenador de la albiceleste, externó su preocupación por la permisividad de los árbitros en un certamen dominado por el juego fuerte.

Alarcón informó que la final entre Argentina y Chile la dirigirá el colombiano Wilmar Roldán. Dijo que para elegirlo se basaron en su experiencia mundialista.