La malnutrición y las desigualdades socio-económicas son los factores primordiales que determinan una baja calidad del envejecimiento de las personas, por lo que además de que la población de edad media debe modificar estilos de vida y nutrición, también se deben tomar medidas públicas para incentivar la prevención de los factores de riesgo de patologías músculo-esqueléticas y de fragilidad y dependencia funcional de los adultos mayores.

La Fundación de la Academia de Medicina de Francia (FAM) y la Academia Nacional de Medicina de México (ANMM), a través de sus directores Jean-Marie Dru y Enrique Graue, respectivamente, firmaron un acuerdo de apoyo e intercambio de información en los esquemas de salud pública, ya que el país europeo tiene amplia experiencia en los temas de nutrición para la longevidad; tratamientos de la obesidad y cobertura universal.

En el Foro Franco Mexicano de Salud Pública e Innovación Médica, el presidente de FAM indicó que la esperanza de vida aumenta rápidamente, que repercute en el incremento desmesurado del gasto en salud, que, a su vez, impacta las finanzas públicas. Por ello, se deben abordar fundamentalmente los problemas relacionadas con el envejecimiento, así como la obesidad y la hipertensión.

Modelos de atención

Guillermo Ruiz Palacios, comisionado nacional de los Institutos Nacionales de Salud y Hospitales de Alta Especialidad, detalló que una de las partes fundamentales del convenio es el intercambio de información sobre los efectos de la nutrición, del Programa Nutrimex y de los modelos de atención.

Luis Miguel Gutiérrez Robledo, del Instituto de Geriatría, experto en temas relacionados con la nueva vejez, planteó que en Francia la esperanza de vida es de 82 años, en México de 76, y en Estados Unidos de 79. Es decir, nuestro esquema de salud pública no está muy lejos de los parámetros de este último país, que tiene uno de los mayores presupuestos del mundo en la materia.

Por su parte, Marco Antonio Martínez Ríos, del Instituto Nacional de Cardiología, tocó el tema de la prevención del riesgo cardiovascular. Precisó que aun cuando medicamente se han logrado avances importantes en esta rama, hay factores de salud pública que se tienen que revisar; por ejemplo, 50 por ciento de los mexicanos que padece hipertensión no lo sabe, y de los que están enterados, la mitad no se trata. Además, de los que se atienden, la mitad no lo hace correctamente.

Armando Ahued, secretario de Salud del Gobierno del Distritro Federal, comentó que México ya tomó las medidas protocolarias necesarias para evitar que llegue el virus del sarampión. Sostuvo que en breve se inaugurará un hospital para la atención del VIH-sida en Iztapalapa