A fin de evitar que las autoridades delegacionales salientes, en especial donde llegarán gobernantes que pertenecen a distintos partidos, saqueen el patrimonio bajo su resguardo, vecinos de varias demarcaciones crearon una red de contralores ciudadanos, que estarán vigilantes de las obras que se realicen en lo que resta de la actual gestión, con el fin de evitar trabajos inflados o inconclusos.

En conferencia de prensa, Alondra Durán, Alejandro Perea, Pedro Cevallos y Luis Valdivia, organizadores de la red de contralores, dieron a conocer la integración de este grupo en la delegación Cuauhtémoc, pero anunciaron que se extenderán a otras demarcaciones con la finalidad de hacer las denuncias públicas de lo que se haga o deje de hacer en las colonias.

En el caso de Cuauhtémoc, indicaron que pondrán énfasis en la rendición de cuentas del presupuesto otorgado a la rehabilitación de los mercados públicos, a los que se les comprometieron recursos que no fueron aplicados en muchos de los casos.

Sabemos por experiencias previas que los gobiernos salientes tratan de sabotear y dejan sin condiciones de operación a las autoridades entrantes, al sustraer insumos, material y equipo, así como recursos documentales de la operación de programas y cuentas bancarias, manifestaron en un pronunciamiento conjunto.

Ante ello, hicieron un llamado a todas las organizaciones de la sociedad civil y ciudadanía en general en todas las demarcaciones, pero especialmente donde habrá de realizarse un cambio entre partidos de diferente signo político, a organizarse en estas redes ciudadanas.

Indicaron que además de observar las obras, también pondrán especial vigilancia en almacenes, bodegas, oficinas territoriales de los gobiernos delegacionales, a fin de que no sea saqueado el patrimonio.

En ese contexto, exigieron al gobierno capitalino que no sea cómplice y proporcione el avance financiero que tenían las delegaciones antes de la veda electoral y cómo son ejercidas las partidas presupuestales a lo largo del periodo de transición, para lo cual se apoyarán en el Instituto de Acceso a la Información Pública y Protección de Datos Personales del Distrito Federal (Info-DF).

Luis Valdivia aseguró que no los motiva la venganza en contra del algún partido, sino el hacer un acompañamiento ciudadano organizado en el proceso de transición, que llevará 120 días. Nos preocupa la transferencia de un equipo a otro, donde podría haber un daño patrimonial, apuntó.

Los convocantes aseguraron que en estas redes puede participar cualquier ciudadano, independientemente del partido en que milite o simpatice, por lo que informaron que el próximo sábado 13 de junio realizarán por la mañana una asamblea en la sede del Sindicato de Trabajadores Tranviarios.