La Paz, BCS.

Las coaliciones encabezadas por los partidos Acción Nacional (PAN) y Revolucionario Institucional (PRI) se proclamaron vencedoras en la contienda por la gubernatura de Baja California Sur.

Al cerrar las casillas, a las seis de la tarde hora local, la dirigencia estatal del PAN se apresuró a ofrecer una conferencia de prensa en la que dio a conocer el triunfo de su candidato a gobernador, Carlos Mendoza Davis, según una encuesta de salida de la empresa Ulises Beltrán y Asociados.

De acuerdo con este sondeo, Mendoza Davis obtuvo 46 por ciento de los votos; Ricardo Barroso, del PRI, 35 por ciento; Jesús Druk González, de la coalición PRD-PT-MC, 12 por ciento; Víctor Manuel Castro Cosío, de Morena, 6 por ciento, y el independiente Benjamín de la Rosa, uno por ciento.

El dirigente estatal panista, Rigoberto Mares, reconoció que si bien sus datos no eran oficiales, revelaban la tendencia en favor de Carlos Mendoza con 11 puntos de ventaja sobre su inmediato seguidor, el priísta Ricardo Barroso. Sostuvo que también extraoficialmente, el blanquiazul triunfó en las cinco presidencias municipales del estado. Aseguró que el PRI incurrió en irregularidades en la campaña y durante la jornada electoral.

La coalición PRI-PVEM-Panal igualmente se proclamó ganadora de la gubernatura y calificó como una irresponsabilidad que el PAN saliera a declararse vencedor, cuando ni siquiera se tenían los resultados del uno por ciento del Programa de Resultados Preliminares (PREP).

Señaló que los panistas recurrieron a su misma estrategia utilizada durante la campaña, de encuestas manipuladas para pretender engañar a la población. Jorge Federico Schiaffino, delegado del Comité Ejecutivo Nacional del PRI en Baja California Sur, dijo que a reserva de que sus datos se confirmaran con resultados oficiales, tenían una ventaja de cuatro a cinco puntos según las actas de 22 por ciento de sus representantes de casilla.

Dijo que el PAN incurrió en anomalías durante la campaña y en la jornada electoral. Sostuvo que el blanquiazul gastó 35 millones de pesos, cuando el tope era de 11 millones 600 mil, y este domingo hubo persecución, secuestro e intimidación contra militantes y funcionarios de casilla priístas, acciones en las que participaron funcionarios panistas y policías estatales.

Señaló que otra irregularidad que despertó desconfianza hacia las autoridades electorales, del Instituto Nacional Electoral y del Instituto Estatal Electoral, fue el retraso en la apertura de casillas, pues a las 10:15 de la mañana había ausentismo en 80 por ciento de las mismas.

Eso, dijo, fue en contra de muchos de sus simpatizantes que acostumbran a depositar su voto temprano y al no ver abierta la casilla optaron por regresar a sus hogares.

Los dirigentes del Partido Verde Ecologista de México y del Panal también criticaron a las autoridades electorales y acusaron una elección de Estado, pero indicaron que aun con eso los resultados oficiales los favorecerían.

Mientras en las filas del PRI había cautela, en las del PAN hubo optimismo y militantes y simpatizantes salieron a las calles a festejar su supuesto triunfo, a pesar de los fuertes vientos que arreciaron este domingo por la noche en la ciudad de La Paz.

La tormenta tropical Blanca provocó ausentismo de funcionarios de casilla, lo que a su vez propició un severo retraso en la instalación de las 902 casillas programadas en la entidad.

La consejera presidenta del Instituto Estatal Electoral, Rebeca Barrera Amador, dijo que a las 10 de la mañana 50 por ciento de las casillas no se habían instalado por falta de funcionarios, sobre todo en el municipio de Los Cabos, donde comenzó a llover desde temprano.