Tal como anticiparon, a las 8:30 horas el secretario de Gobierno del Distrito Federal, Héctor Serrano Cortés, y un par de horas después el mandatario capitalino, Miguel Ángel Mancera, la jornada electoral en la ciudad de México se desarrolló con tranquilidad, sin que se registraran incidentes graves, siendo notorias la presencia de convoyes de patrullas y policías por las calles de todas las delegaciones.

Desde su arribo a la casilla donde votó, Serrano Cortés se mostró confiado en que sería una jornada tranquila, por lo que esperó casi 30 minutos, pese a que en la fila había cinco personas, debido a que todavía no se abría, y se dio tiempo para desayunar con los reporteros.

La instalación y apertura de casillas en algunas delegaciones demoró hasta cuatro horas. Minutos después de las 11, por separado el mandatario capitalino y el Instituto Electoral del Distrito Federal (IEDF) reportaban que se llevaba 90 por ciento, pero que fue hasta las 14 horas cuando la autoridad electoral confirmó la apertura del ciento por ciento de las 12 mil 624 previstas.

Con antelación, el Instituto Nacional Electoral (INE) informó que los Panchos Villas se habían opuesto a que se colocaran dos centros de recepción del voto en Iztapalapa. En esta misma demarcación, una docena de estudiantes de la Universidad Autónoma de la Ciudad de México impidieron que se instalaran dos casillas en el plantel San Lorenzo Tezonco, por lo que tuvieron que colocarlas en el exterior.

Seguimiento desde el C4

El estudiante Demián Ávila explicó que esta acción era en respuesta a la convocatoria de los padres de los normalistas desaparecidos de Ayotzinapa de boicotear la elección, y aunque hubo molestia de algunos representantes de casilla, el incidente no pasó a mayores.

De acuerdo con los consejeros electorales Pablo Lezama y Dania Paola Ravel, en 640 casillas se tuvo que echar mano de los ciudadanos que estaban formados para votar, pues no se presentaron los funcionarios de casilla insaculados.

Tras emitir su voto, el mandatario capitalino se trasladó al Centro de Monitoreo C4, para supervisar el desarrollo de la jornada electoral. Serrano advirtió que sería notoria la presencia de la fuerza pública, lo cual, afirmó, tiene con único afán promover y motivar la participación.

El IEDF reportó que había recibido 190 incidencias, que iban desde el cambio de lugar de la mesa receptora de voto sin causa justificada y la existencia de propaganda partidaria en una casilla, hasta la suspensión temporal de la votación o permitir a una persona sufragar sin credencial de elector.

Esos hechos, los consejeros electorales los calificaron de no graves. Incluso, Laura Chinchilla, vocera de la misión de observadores de la Organización de Estados Americanos, señaló que el proceso avanzaba sin mayores incidentes.

En tanto, de acuerdo con los datos proporcionados por la Procuraduría General de Justicia y la Secretaría de Seguridad Pública capitalinas, se tuvo saldo de siete personas detenidas, una en Iztacalco por compra de votos, tres por alterar el orden público y dos más tras disparar al aire en la colonia Nativitas, cerca de una casilla electoral, así como una funcionaria de casilla en Coyoacán acusada de no entregar las tres papeletas correspondientes a cada ciudadano y guardar parte de ellas, por lo que fue trasladada a la Fiscalía de Delitos Electorales.

El procurador Rodolfo Ríos Garza detalló que en total se presentaron 102 denuncias, de las cuales 19 fueron consideradas como delitos electorales y el resto del fuero común, como lesiones, amenazas y robo, y se iniciaron tres averiguaciones previas en Cuajimalpa, Iztacalco y Coyoacán.

A lo largo de la jornada los candidatos de Morena denunciaron el acarreo y compra de votos en favor de los aspirantes del PRD. En Benito Juárez, Bertha Luján advirtió acarreo de personas en autobuses, microbuses y taxis para ir votar en la colonia Santa Úrsula, mientras vecinos de ésta afirmaron que recibieron llamadas a sus domicilios entre las 2 y las 4 horas del domingo, en las que una grabación les pedía votar por el PAN.

En Tlalpan se enviaron mensajes a teléfonos celulares en los que se afirmaba que le habían retirado el registro a Claudia Sheinbaum, y que se manifestaría en las oficinas del INE.

En el barrio de San Ignacio, en Iztapalapa, se pudo observar cómo de manera intermitente las personas después de votar acudían a una vecindad ubicada en Pachicalco 93 –cuya fachada tenía propaganda de la candidata del PRD para el mismo cargo, Dione Anguiano–, donde antes de ingresar les pedían mostrar su credencial de elector. En Cuauhtémoc, habitantes de vecindades de las colonias Doctores, Guerrero y Obrera señalaron que había ido gente del PRD y les ofrecía hasta 500 pesos por su voto.

En ese tenor se manifestaron los candidatos de Álvaro Obregón, Azcapotzalco e Iztacalco.

A las tres de la tarde, la candidata de Morena a jefa delegacional de Iztapalapa, Clara Brugada, informó que había presentado 17 denuncias por distintos delitos electorales ante la Fepade, entre ellos acarreo y compra de votos, en por lo menos 150 puntos de esta delegación.

Por su parte, el PRD denunció operativos de compra de votos en la delegación Cuauhtémoc y Coyoacán en favor del PRI y PAN, en el mismo orden.

Al cierre de las casillas, la Secretaría de Seguridad Pública del Distrito Federal aseveró que el operativo que se aplicó funcionó y se desarrolló con tranquilidad en toda la ciudad.