Los jóvenes integran un sector olvidado o casi no atendido social, política y económicamente, incluso por el teatro, que se centra en otros públicos, expresó en entrevista David Tort, director del musical Mis mejores amigos, que será estrenado este domingo, en el teatro Wilberto Cantón de la Sociedad General de Escritores de México (Sogem).

El protagonista central tiene siete personalidades, que se transformarán en sus mejores amigos. La adolescencia es una etapa de definiciones, decisiva, de determinar el futuro; quienes tienen hijos de esa etapa saben mucho sobre el tema, por lo que esta obra puede ayudar a reflexionar en familia.

Vehículo de identificación

Hay que poner más atención al público púber y adolescente, que puede hallar en el teatro un gran vehículo de identificación. Debemos ofrecerles materiales que les provoquen una reflexión, además de que los diviertan.

La obra presenta a un muchacho de 15 años con problemas de personalidad que en medio de canciones descubre poco a poco de qué está hecho y cómo puede aprender a ser seguro de sí mismo.

En Mis mejores amigos participan 16 jóvenes actores. La música y dirección escénica son responsabilidad de Tort, quien ha producido, escrito y dirigido 26 obras musicales; fue director de orquesta de Hairspray, musical de Broadway, protagónico de La tiendita de los horrores. Ha ganado durante cinco años consecutivos el premio APT a la mejor música de teatro. Ahora dirige una obra escrita por Salvador Martínez.

“Nuestra apuesta es hablar a los chavos con su lenguaje, hacer nuestros sus temores y fantasías para que encuentren un punto de identificación. Con esto logramos muchas cosas: que les guste el teatro y se acerquen al quehacer artístico y escénico con confianza. Sabrán que pueden identificarse, o al menos reflexionar acerca de temas importantes de la vida. De eso se trata el teatro, de mover el espíritu. La oferta está dirigida en su mayoría a los niños pequeños o a los adultos, pero hay un hueco muy importante, el de los púberes y adolescentes, cuya etapa es crucial en la formación del carácter y la personalidad.

Ya en sí es una edad difícil en la que no encuentran buenos interlocutores, así que el teatro puede ser una buena opción, expone Salvador Martínez.

La comedia musical contará con las actuaciones de Luis Fernando Romero, Cristopher Martínez, Axel Santos, Carlos Alexis, Sebastián Martínez y David Reyes, entre otros.

Para Tort, el objetivo es que la familia se motive por medio de las canciones. “Por lo regular, las obras que tocan los problemas de los jóvenes abordan los tópicos de la drogadicción, bullying o confrontación, y aquí decidimos hacerlo en una farsa de comedia musical para que el tratamiento sea más ligero.

“El autor, Salvador Martínez, escribió un esbozo de este texto cuando tenía 15 años, ahora tiene más de 40 y retomó su texto. La adaptó y la hizo más contemporáneo. Lo teatralizó. Es amante de los musicales y nos juntamos para este trabajo. Yo he hecho musicales desde hace 25 años. Eligimos ritmos juveniles porque el público base es el de los jóvenes. Por más que se suavice el tratamiento el tema, siempre será menor que en el cine, donde a una película de terror, al quitarle el sonido, pierde mucho de su chiste.

“El terror también entra por el oído. Las emociones siempre van acompañadas por la música. Aquí están acompañadas de la emoción de la escena. Las diferentes personalidades del personaje central, Juan, son sus mejores amigos. Son fantasmas que son sus personalidades. El trato es de comedia muy ligera, con canciones. Para mí la adolescencia fue una etapa difícil, porque mis papás se separaron cuando yo tenía tres años. No viví con ninguno de los dos, y siempre estuve de arrimado con una tía. Creo que por eso me dediqué al arte”. Infancia es teatro.

La producción es de Palcoscénico y las funciones serán los domingos a las 11:30 y 13:30 horas en el teatro Wilberto Cantón (José María Velasco 59, Benito Juárez, San José Insurgentes.)