Monterrey, NL.

En Nuevo León “se viven elecciones muy competidas, y aunque se vislumbra la judicialización del proceso por lo cerrado que serían los resultados entre los dos primeros lugares, no existe un escenario violento para el periodo poselectoral”, afirmó el investigador universitario y ex director de la Facultad de Derecho de la Universidad Autónoma de Nuevo León, José Luis Prado Maillard.

En entrevista con La Jornada, el especialista sostuvo que el tema de la integración del Congreso local ha quedado fuera de los reflectores, pero será importante para quien gane la contienda por la gubernatura, pues tendrá que negociar con los legisladores la aprobación de nuevas leyes y el presupuesto con el que contará el mandatario.

“Se ha visto a lo largo del proceso que existe mucha competencia, pero no han existido incidentes y los candidatos han sido muy críticos con sus oponentes, pero dentro de la ley.

“Este un proceso inédito, porque además de que es la primera vez que se realizan unas elecciones de este tamaño en el país, para los neoleoneses es la primera ocasión en que una mujer puede gobernar el estado o que un candidato independiente gane un cargo de este tipo.

“Lo mejor es que el resultado de las urnas será lo que norme la elección, ya que si resultan holgados entre el primero y segundo lugar, eso permitirá que no se judicialice el proceso, porque no habrá argumentos para pedir una revisión o presentar una impugnación contra los comicios.

“La efervescencia política que se vive permitirá una participación activa de la ciudadanía, lo cual redundará en la disminución del abstencionismo, que en ocasiones ha superado 50 por ciento del electorado.

“Un tema muy importante, y que parece que se perdió de vista, es el referente al Congreso, ya que gane quien gane tendrá que gobernar de acuerdo con la legislatura. Si triunfa la abanderada del tricolor (Ivonne Álvarez García), contará con la estructura de su partido y se facilitará su relación con la legislatura si su instituto político obtiene mayoría.

Lo inédito es que si gana un candidato independiente va a tener que apoyar su gestión en el Congreso con la finalidad de que se aprueben sus iniciativas y le concedan los recursos que solicite de presupuesto para poner en marcha sus proyectos y políticas públicas. Será un ejercicio constitucional interesante, ya que tendrá que negociar con los partidos a los que tanto han criticado los (candidatos) independientes, afirmó Prado Maillard.

El investigador universitario destacó que quien gane los próximos comicios deberá analizar el trabajo realizado en materia de seguridad y es muy probable que deba considerar que los programas actuales han permitido disminuir los índices delictivos y que con el apoyo del gobierno federal se han logrado instrumentar proyectos que hoy mantienen la mayor parte del estado sin hechos de violencia como los ocurridos hace cuatro años.

En tanto, la Comisión Estatal Electoral y la Secretaría del Trabajo de Nuevo León firmaron un acuerdo para instar a las empresas a que el 7 de junio faciliten que sus empleados acudan a votar o participen como funcionarios de casilla, sin afectar sus derechos e ingresos laborales.

Por otra parte, a un día de que termine el plazo para que presenten sus declaraciones patrimoniales, de intereses y fiscales, sólo han cumplido ese trámote ocho de los 609 candidatos que buscan un puesto de elección popular el 7 de junio.

Concluyen proselitismo

Jesús María Elizondo, candidato a la gubernatura por el Partido Humanista, realizó su cierre de campaña en el mirador del cerro del Obispado. La abanderada del PRI, Ivonne Álvarez, conluyó tareas de proselitismo en los municipios rurales de Ratones, Hualahuises y General Bravo.

El candidato independiente Jaime Rodríguez, El Bronco, recorrió los municipios de General Terán y Montemorelos, y se reunió en privado con empresarios en el Club Industrial de Monterrey.