Las puntuaciones los avalan, asegura
Martes 2 de junio de 2015, p. a15
El entrenador de clavados Iván Bautista se dice convencido de que sus pupilos Alejandra Orozco –quien trabaja en dueto con Paola Espinosa–, Iván García y Germán Sánchez no sólo clasificarán a los Juegos Panamericanos Toronto 2015 (5-6 de junio/selectivo) y al Mundial de la especialidad de Kazán, Rusia (25-28 de junio), sino además subirán al podio y luego repetirán en los Juegos Olímpicos de Río 2016.
No es una especulación ni un buen deseo. Su confianza está basada en que cada vez muestran más compromiso con su preparación, una técnica adecuada y depurada, pero sobre todo que en las recientes competencias mundiales no han dejado de ganar medallas, justo frente a quienes serán sus principales rivales en esas justas alrededor del orbe.
Un día después de terminada la sexta y última etapa de la Serie Mundial FINA en Mérida, Yucatán, serial donde fueron destacados protagonistas sus muchachos, en plática telefónica hizo hincapié en que particularmente Iván García –quien el domingo se colgó la plata en la plataforma– ha alcanzado puntuaciones por arriba de 550 unidades, que lo colocan entre los mejores del planeta.
Lo mismo cuando hizo mancuerna con Germán Sánchez en Kazán, donde los jueces les otorgaron 556 puntos. Esto habla de la consistencia que están logrando, por lo que ahora corresponde mantener esa forma deportiva para la justa continental de Toronto y después para la disputa en Rusia, porque el tiempo apenas alcanza para afinar detalles.
En cambio, confirma que para la justa veraniega de Río trabajarán muy fuerte en la ejecución de 4 y media vueltas al frente, que tiene el mayor grado de dificultad –que sólo los chinos también presentan en su rutina–, porque es una de las piezas claves para, de tirarlo bien, alcanzar una medalla.
Los jueces en el mundo conocen muy bien a los participantes, por lo que los califican con mucha exigencia, de allí la necesidad de que desde la primera vez que vean esas ejecuciones se den cuenta de que ya las dominan, y de la misma forma espera una evaluación alta.
El entrenador se felicita porque los ha sabido conducir no sólo en lo deportivo, sino aun en su vida personal, evitando todo aquello que los perjudique, por lo que ahora los resultados están a la vista y materializados en medallas de todos los colores.