Los Ángeles.

Desde quienes no le hacen mucho caso a la conservación del agua hasta los que hacen alarde de colaborar como el que más, las celebridades del ámbito del espectáculo desempeñan un papel prominente en la lucha contra la sequía que azota California.

Algunos astros, cuyos jardines lucen rozagantes en momentos en que se pide a los residentes reducir el consumo del agua, son censurados en las redes sociales. Mientras tanto, otros toman la iniciativa para conservar el agua y muestran sus jardines sedientos.

Estamos en todo esto juntos, afirmó la actriz Wendie Malick, quien depende del agua de pozo en su hogar en las montañas de Santa Mónica. Lamentablemente tuvo que llegar este momento de crisis para unirnos a todos.

Beverly Hills, un enclave de celebridades que sigue ostentando jardines impecables, aprobó recientemente nuevas restricciones y sanciones para conservar el agua, las cuales comienzan este lunes.

Malibú ha tenido desde hace tiempo restricciones para el consumo de agua, según la especialista municipal en programas ambientales Casey Zweig, pero mientras asegura que la ciudad no acusará públicamente a nadie, ofrece un cibersitio en que los residentes pueden denunciar anónimamente a sus vecinos que derrochen agua. Comentó que su equipo visita dichas propiedades.

Una vez que uno comunica esta información, la gente tiende a querer hacer lo correcto e imaginar la mejor solución, afirmó.

A los residentes de Malibú les encanta el aspecto natural. Quieren coexistir de muchas maneras con este hermoso ambiente natural para vivir en el cual pagan grandes sumas.

Los derrochadores tienen muchas oportunidades de rehabilitarse antes de ser multados, precisó Zweig.

Instalará cisternas

Barbra Streisand, quien fue objeto de censuras, afirmó que ella y su marido, James Brolin, han dejado que la mayoría de sus jardines pierda su verdor en su residencia de Malibú. La pareja también instalará cisternas para recoger agua de lluvia, si California tiene la suerte suficiente como para recibir algo de lluvia, precisó.

Cher, también residente en Malibú, dejó que el césped de su jardín perdiera el color y ha mencionado la escasez de agua en Twitter. El mes pasado en uno de sus mensajes se quejó de que California usara agua fresca para la fracturación hidráulica. Estamos en una sequía catastrófica. Agua significa vida. No podemos beber petróleo, escribió.