Campeche, Camp.

De los nueves estados donde habrá elección de gobernador este 7 de junio, Campeche es el más definido. Se espera que el PRI retenga la entidad y la mayoría de los puestos de elección: 11 alcaldías, 21 diputados locales de mayoría y dos legisladores federales.

El Consejo General del Instituto Electoral del Estado autorizó las 10 solicitudes de candidaturas a gobernador de ocho partidos, una coalición y la del independiente Luis Antonio Che Cu, líder del Frente Campesino Independiente Emiliano Zapata (Freciez), a pesar de que éste tiene órdenes de arresto pendientes y ha estado encarcelado por promover invasiones agrarias y bloqueos carreteros.

Sólo han realizado campaña Alejandro Moreno Cárdenas, de la alianza PRI-PVEM; Jorge Rosiñol Abreu, por el PAN; Layda Sansores San Román, por Morena, y Fernando Dante Imperiale García, por el PRD, quienes han recorrido en al menos dos ocasiones los 11 municipios del estado.

José Luis Góngora Ramírez, del PT, y José Angelino Caamal Mena, de Nueva Alianza, se han conformado con visitar colonias populares, avenidas principales y mercados públicos de Ciudad del Carmen y Campeche capital.

La inactividad política de los abanderados César Israel Lechuga González, de Movimiento Ciudadano; Olimpia Álvarez Casanova, del Partido Humanista, y Roger del Carmen Ortegón García, de Encuentro Social, les valió un llamado de atención de la presidenta del Consejo General del Instituto Electoral del Estado de Campeche, Mayra Fabiola Bojórquez González.

La opinión pública los calificó de candidatos fantasma, pues no se les veía en ninguna parte, por lo que la autoridad electoral les recordó que se revisarán sus informes financieros para verificar si realmente erogaron los más de 9 millones de pesos que recibieron para sus campañas.

El independiente Che Cu se ha limitado a recorrer comunidades rurales donde tiene presencia el Freciez (siglas que aparecerán en las boletas electorales), y se ha quejado de que no recibe el financiamiento público legal de un millón 200 mil pesos. Sus acusaciones han sido desmentidas por las autoridades electorales.

Moreno Cárdenas (PRI-PVEM); Rosiñol Abreu (PAN) y Layda Sansores, (Morena) aparecen como los punteros en los sondeos electorales, en ninguno de los cuales ha figurado abajo alguna vez el abanderado tricolor. En promedio, ha mantenido ventaja de 18 a 20 puntos sobre su más cercano contendiente, que es el PAN.

Sansores compite por tercera vez

Layda Sansores es la tercera vez que busca la gubernatura (1997, 2003 y 2015), y asegura que está recibiendo más apoyo de la gente que en su primera incursión, cuando se dijo víctima de un fraude del priísta José Antonio González Curi, quien es también uno de los principales asesores y operadores de Moreno Cárdenas.

En aquella elección –1997– a Sansores, que venía de renunciar al PRI, le reconocieron 92 mil 898 votos (41.2 por ciento de la votación total) mientras al priísta González Curi le concedieron 108 mil 249 (48 por ciento).

La entonces perredista alegó fraude y mantuvo un conflicto poselectoral de nueve meses en la Plaza de la República, hasta que en una incursión por edificios públicos y oficinas de gobierno, descubrió un centro de espionaje financiado por el gobierno del estado, donde encontró grabaciones a políticos y periodistas. La candidata perdedora se concentró en exigir castigo para los financiadores de ese centro y abandonó paulatinamente la lucha.

La presencia de González Curi en el equipo del priísta Moreno Cárdenas otorgó la oportunidad de la revancha a Sansores, quien ha mantenido un discurso crítico contra el abanderado del PRI-PVEM, a quien ha denunciado por enriquecimiento ilícito ante la Procuraduría General de la República y advierte que si Alito, como se conoce al abanderado aliancista, llega a ser gobernador, “le abriría las puertas al narco”.

Aún así, los recientes sondeos muestran que la pugna final se dará entre Moreno Cárdenas y el panista Jorge Rosiñol Abreu, pues Sansores aparece en todos los sondeos hasta con 30 puntos por debajo del priísta.

Carro completo

En los comicios de 2012, el PRI-PVEM ganó las 11 alcaldías, 20 de los 21 distritos locales al Congreso del estado y 19 de las 20 juntas municipales. Hace tres años, el PRI se llevó los 11 ayuntamientos, los 20 de los 21 distritos electorales locales y 19 de las 20 juntas municipales.