El panorama de la explotación sexual infantil en México arroja datos contradictorios, pues mientras en 2013 nuestro país ocupó el primer lugar en tráfico de pornografía infantil y cada año 85 mil menores son explotados sexualmente, entre 2000 y 2014 no se registró una sola averiguación previa, consignación, operativo o sentencia por turismo sexual en la ciudad de México, la más grande del país.

Al presentar un video preventivo relacionado con el turismo sexual, representantes de organizaciones civiles que defienden los derechos de los menores de edad, señalaron en conferencia de prensa que lo anterior demuestra que existe impunidad total en el tema.

Juan Martín Pérez García, director ejecutivo de la Red por los Derechos de la Infancia (Redim); Sandra Salcedo, investigadora del Programa de Derechos Humanos de la Universidad Iberoamericana; Miguel Ortega, del Centro de Estudios Sociales y Culturales Antonio de Montesinos, y Teresa Pérez, del Centro de Investigaciones para la Equidad Política y Desarrollo, indicaron que dada la nula acción del Estado para combatir la trata de menores la sociedad debe subir el nivel de su exigencia y llevar a instancias internacionales los casos para que ahí reciban sentencia.

Pérez García indicó que en la comparecencia que hace unos días el Estado mexicano sostuvo ante el Comité de los Derechos del Niño de la Organización de las Naciones Unidas, a la representación de nuestro país se le requirió mencionar al menos un caso de trata de menores y venta o producción de pornografìa infantil que tuviera sentencia. Pero no hubo respuesta. Y no hubo, porque no la hay. Tenemos más de 3 mil 600 investigaciones relativas a la trata que incluyen casos de adultos. Algunas han recibido sentencia, pero no las de menores.

Señaló que actualmente hay un fenómeno de desaparición masiva de mujeres adolescentes en México. De la base oficial de datos, de 23 mil personas desaparecidas 7 mil son menores de edad y de ellas 90 por ciento, mujeres, informó.

Sandra Salcedo hizo referencia a la relación entre pobreza y vulnerabilidad. Dijo que si bien nadie está exento de ser víctima de alguno de estos crímenes, hay estudios que dan cuenta de que las personas con carencias están más expuestas. Sabemos que somos un país 80-20; 80 por ciento de personas excluidas, 20 que tienen satisfechas sus necesidades. La desigualdad extrema, según se ha comprobado en informes e investigaciones, corrompe la política, la corrupción permite la impunidad y ésta nos afecta en materia de violaciones a los derechos humanos.

Los expertos insistieron en la importancia de prevenir los casos de trata de menores. Indicaron que ante esta situación que se vive en el país, las niñas y los niños no deben ir solos por las calles y es necesario que cuenten con vigilancia al usar las redes sociales, pues a través de ellas los tratantes podrían contactarlos. También señalaron que las primeras horas, después de la desaparición de un menor son vitales para dar con su paradero, por lo que instaron a emplear la Alerta Ámber.