La Organización Panamericana de la Salud (OPS) advirtió desafíos para la diversidad de preferencias sexuales, aun cuando desde hace un cuarto de siglo la Organización Mundial de la Salud eliminó a la homosexualidad de la lista de enfermedades mentales.

Antes de la conmemoración del Día Nacional de la Lucha contra la Homofobia y el Día Internacional contra la Homofobia y Transfobia, el Consejo Nacional para Prevenir la Discriminación destacó que para las personas que tienen una orientación distinta a la heterosexual uno de los principales problemas en su vida cotidiana es la discriminación. Este aspecto se agudiza si enfrentan contextos de pobreza.

De acuerdo con cifras nacionales, 42.8 por ciento de la población considera que la policía es el grupo más intolerante con las personas de preferencia sexual distinta.

El grupo consultado cree que en el país el principal problema para homosexuales, lesbianas y bisexuales es la discriminación (52 por ciento), la falta de aceptación (26.2), así como las críticas y burlas (6.2 por ciento). Incluso, tres de cada 10 personas no estarían dispuestas a permitir que en sus casas viviera una persona con VIH-sida.

También se detectó que 70 por ciento de la población en México cree que no se respetan los derechos de los homosexuales, pues al menos cuatro de cada 10 no aceptaría que convivieran en sus domicilios.

El Conapred destaca que una de las expresiones más graves de la homofobia es la violencia. Señala que de 1998 a 2008 se abrieron 689 expedientes por agresiones a la población de la diversidad sexual, entre las que se incluyen homicidios y agresiones graves.

Carissa F. Etienne, directora de la OPS, dijo que el estigma y la discriminación tienen efectos reales y adversos en la salud de las personas LGBT, lo que se traduce en que se crean barreras que van desde la negación pura y simple de la atención, a la atención deficiente o suposiciones erróneas acerca de las causas de sus problemas de salud.

El 17 de mayo es el Día Internacional contra la Homofobia y la Transfobia; en 1990 la OMS eliminó la homosexualidad de la Clasificación Internacional de Enfermedades, con lo cual el consenso generalizado es que la homosexualidad es una variación natural de la sexualidad humana y no se le puede considerar condición patológica.

Entre los avances están el rechazo a las denominadas terapias de cambio de orientación sexual, las cuales carecen de justificación médica y científica y representan una grave amenaza para la salud y el bienestar de las personas afectadas, señala un documento técnico publicado por la OPS/OMS en 2012.

Otro avance fue la resolución aprobada en septiembre de 2013 por los ministros de Salud de las Américas en la OPS para reducir las disparidades en el acceso y el uso de los servicios de salud por parte de la población LGBT.

Jaime López Vela, presidente fundador de la ONG Agenda LGBT, señaló que en el caso de México las políticas de salud para la comunidad de la diversidad sexual son en general deficientes.