Domingo 3 de mayo de 2015, p. a16
Si tiene algo que hacer de manera urgente como escribir, trabajar, limpiar la casa, lavar los platos, ordenar la alacena, salir a entrenar, pagar los impuestos, ir al súper, una junta importante, buscar (y para el caso, encontrar) algo, entonces no abra alguno de los libros de Liniers, porque entonces ya no hizo nada de lo urgente.
Si está enojado con el mundo, la vecina, el compañero de trabajo, la contaminación, la lluvia, el sol, el tráfico, el aumento en el precio de cualquier cosa, las reformas, los baches en las vialidades, las marchas, los bloqueos de calles, elevadores descompuestos, el microbús que se le echó encima, entonces no lea ninguno de los cuatro volúmenes de Macanudo que ha publicado en México la editorial Sexto Piso, porque entonces terminará sonriendo y olvidando todo aquello que lo tenía enojado.
Eso hacen las tiras del caricaturista e ilustrador argentino Ricardo Siri Liniers con personajes traviesos, inocentes, locos, misteriosos, que ven al mundo de cabeza, de lado, enredados, enamorados, imaginando, soñando, jugando, columpiándose, y dándole a la vida un sentido más sencillo.
Son un montón de personajes en esas tiras: Enriqueta, su gato Fellini y su osito Madariaga, El robot sensible, los duendes, los pingüinos, Martincito y Olga su amigo imaginario, Lorenzo y Teresita. Picasso y las cosas que a lo mejor le sucedieron, las ovejas, el misterioso hombre de negro, y sí, el conejo de lentes que no es otro que Liniers autodibujándose y contando sus verdaderas aventuras.
Así que por culpa de Liniers usted terminará haciendo nada y sonriendo, eso a primera lectura, porque después se dará cuenta de que las tiras no son tan inocentes y hay algo que se queda en la cabeza dando vueltas y vueltas.
Liniers nació en Buenos Aires en 1973 y hoy es uno de los dibujantes más reconocidos; si hablamos de seguidores en las redes sociales tiene casi 98 mil en Instagram, 426 mil en Twitter y casi 700 mil en Facebook.
No sólo dibuja, también fundó La editorial común, y tiene otros libros como Los sábados son como un gran globo rojo, Mamarracho, que es un libro para dibujar recomendado para niños y adolescentes a los que los adultos no le harían el feo, y Cosas que pasan si estás vivo, pero esos todavía no se encuentran en México. También ha diseñado tapas de discos, a veces toca la guitarra en los conciertos de Kevin Johansen, e ilustró una de las portadas de New Yorker.
Mientras llegan los nuevos tomos, habrá que quedarse un rato con los cuatro de Macanudo ya publicados. Para abrir boca, dejamos aquí estas tiras publicadas con autorización de Sexto piso.
Texto: Ericka Montaño Garfias
