Aproximadamente 10 por ciento de los pacientes con asma alcanzan control total de la enfermedad, en 85 por ciento de los casos se logra parcialmente y menos de 5 por ciento experimentan un asma de difícil manejo, señaló Francisco Javier Cuevas Schacht, jefe de Neumología y Cirugía de Tórax del Instituto Nacional de Pediatría (INP).

En entrevista con La Jornada, indicó que en promedio entre 4 y 8 por ciento de la población mexicana padece asma, mal multifactorial en el que influyen los alérgenos, pero también el aspecto genético. Esto último permite vislumbrar en el futuro una posible cura.

Por lo pronto, el asma es una enfermedad crónica, sólo tratable en la disminución de sus efectos y exposición a factores que desencadenan mayor frecuencia de los síntomas o las crisis de asma.

La Organización Mundial de la Salud (OMS) señala que el asma es una enfermedad crónica que se caracteriza por ataques recurrentes de disnea y sibilancias, que varían en severidad y frecuencia de una persona a otra. 

Refiere que los síntomas pueden sobrevenir varias veces al día o a la semana, y en algunas personas se agravan durante la actividad física o por la noche.

Cuevas Schacht destacó que la OMS calcula que hay 300 millones de asmáticos en el mundo, pero prara 2025 prevé que se agregarán 100 millones y destacó que el asma es una de las enfermedades respiratorias más frecuentes en pacientes pediátricos.

El neumólogo indicó que este padecimiento está presente en todos los países, independientemente de su grado de desarrollo y resaltó que en el país los decesos por asma van en descenso desde 1990 a la fecha, de acuerdo con un estudio de uno de los principales investigadores del Instituto Nacional de Enfermedades Respiratorias, Mario Vargas.

Informó que desde hace varios años en el INP no se reporta algún deceso por crisis asmáticas y acotó que las muertes ocurren cuando hay comorbilidades en pacientes adultos, cuando además hay diabetes. 

La OMS resalta que la tasa de letalidad del asma es baja en comparación con otras enfermedades crónicas. 

Cuevas Schacht indicó que los factores medioambientales que pueden detonar el asma en 80 por ciento de los casos son alérgenos, como el polen, alimentos o medicamentos.

Existen muchos mitos en torno a las actividades que pueden realizar los pacientes asmáticos. Un niño bien controlado puede hacer de todo, y precisó que el tratamiento farmacológico consiste en inhalables, antihistamínicos y broncodilatadores.