Maduro reitera acusaciones contra Rajoy de apoyar actos terroristas en Caracas
Felipe González irá al país sudamericano, pese a que el Parlamento lo declaró persona no grata
Jueves 23 de abril de 2015, p. 21
Madrid.
España llamó este miércoles a consultas a su embajador en Venezuela tras declaraciones del presidente Nicolás Maduro sobre un supuesto apoyo del país europeo a actividades terroristas, mientras Caracas anunció que prepara acciones en distintos órdenes para responder al gobierno español.
El Congreso venezolano declaró persona no grata al ex presidente del gobierno español Felipe González y rechazó los pronunciamientos de legisladores de España, Colombia y Chile en favor de la liberación de dos opositores encarcelados.
Maduro acusó la noche del martes al presidente del gobierno español, Mariano Rajoy, de promover actividades terroristas en su país e insistió en llamarlo racista
. Agregó que prepara una respuesta contundente
a España, y dijo que las élites españolas apoyan el terrorismo en Venezuela.
Desde el gobierno de Rajoy se apoya a los terroristas en Venezuela y eso hay que denunciarlo. Yo dije que Rajoy es racista y lo sostengo. Lo es en lo social, en lo histórico y cómo odia a los pueblos de África y Latinoamérica
, dijo en su programa de radio y televisión En contacto con Maduro.
Los calificativos que utilizan las autoridades son absolutamente intolerables y, tomando en cuenta el grado de irritación verbal de Maduro, he decidido convocar a consultas al embajador en Caracas
, explicó a los periodistas el jefe de la diplomacia española, José Manuel García-Margallo.
La cancillería española reiteró en un comunicado: son tan intolerables las afirmaciones sobre un presunto apoyo a actividades terroristas, que resultan particularmente ofensivas para un país como España, que ha sufrido durante muchos años la lacra del terrorismo
.
La llamada a consultas es el último capítulo de una serie de desencuentros diplomáticos entre Madrid y Caracas. Maduro retiró temporalmente a su embajador en España el año pasado y acusó al eje Madrid-Bogotá-Miami de intentar derrocarlo.
Rajoy eligió entonces el silencio, pero el gobierno español dio un giro a esa estrategia en las últimas semanas y se ha manifestado públicamente en defensa de algunos opositores venezolanos.
El Parlamento, con el apoyo del gobernante Partido Popular y el opositor Partido Socialista Obrero Español, emitió una moción a favor de la libertad de Leopoldo López y el ex presidente González (1982-1996) se sumó al equipo de abogados que defiende a López y al alcalde de Caracas Antonio Ledezma, ambos encarcelados.
En respuesta, el Congreso venezolano declaró persona no grata a González, quien a su vez dijo que espera que el gobierno de Maduro no respalde esa decisión, pues le impediría ingresar a Venezuela.
Las relaciones entre España y Venezuela han pasado por muchos altibajos en los últimos 16 años. Casos como el famoso ¡Por qué no te callas!
que el rey Juan Carlos le espetó al fallecido mandatario Hugo Chávez en 2007 enturbiaron las relaciones.
Pero, más allá de encontronazos diplomáticos, ambos países mantuvieron una cooperación económica bastante estable.
Y mientras Maduro identificó a la Federación de Cámaras y Asociaciones de Comercio y Producción (Fedecámaras) como responsable de la guerra económica contra el Estado, Fedecámaras aseguró que importadores e industriales privados del país deben unos 10 mil millones de dólares a sus proveedores internacionales por la demora del gobierno en autorizarles la compra de divisas bajo un férreo control de cambios.
En otro asunto, el vicepresidente del organismo estatal encargado de los puertos, Antonio González, y dos inspectores navales fueron arrestados por su presunta responsabilidad en la compra irregular de tres barcos a compañías españolas, anunció la fiscalía general.