Con su disco Terral, Pablo Alborán consolida de manera firme su estilo: una mezcla de cantautor y baladista que gusta a las mujeres y a gran parte del sector masculino. La base de su despegue popular fueron las redes sociales.

Ayer, en conferencia, arribó entre piropos de comunicadoras.

El primer sorprendido del éxito es el propio Alborán, quien con su Tour Terral se presentará el 24 de abril en el Auditorio Banamex de Monterrey; en el Auditorio Nacional del Distrito Federal, el 24, y en el Auditorio Telmex de Guadalajara el 25.

Como precedente está el concierto que ofreció en el teatro Metropólitan en marzo de 2014, que lo ubicó como un nuevo ídolo, no sólo en México, sino en Argentina, Colombia, Chile, Perú y Uruguay.

En su natal España es un vendedor de discos, a pesar de la crisis económica. Es parte de ese boom que ha elevado las ventas de discos cerca de 21 por ciento, lo cual es esperanzador para una industria y un país golpeados por la carestía. Inclusive, el disco de vinilo está de regreso.

Cumplir un sueño

Alborán expresó: “Presentarme en el Auditorio Nacional será cumplir un sueño. Estamos, mi banda y yo, locos por esta gira. Estamos nerviosos, la verdad, de pensar que vamos a estar en el Auditorio. No puedo decir en qué consiste, pero habrá muchas sorpresas durante el espectáculo, mucho ritmo, sí, mucho ritmo.

Hemos estado varias veces aquí, pero en los primeros conciertos estaba orquestado por mi guitarra o el piano. De repente sale lo del Auditorio: ha sido muy rápido. No será sólo un concierto, sino un espectáculo completo, con música y baile. Habrá baladas románticas y una entrega total, porque he recibido muchos mensajes en redes sociales. Sé que hay carteles promocionales, pancartas en las ciudades, lo cual hace que uno venga acá para que la gente durante dos horas se olvide de los problemas.

Alborán era un desconocido en 2010. Se proyectó en YouTube para que algunos lo escucharan. La respuesta fue increíble: cuando sacó su primer álbum, en 2011, más de dos millones lo seguían en Internet. En ese año dio más de 60 conciertos en España y todo amarró. Antes, oírse en la radio y en la televisión creaba el deseo de ver a un artista. Hoy son más fuertes las redes sociales.

Creo que México es fundamental para cualquier artista. Cuando hemos venido aquí el público te está escuchando, te analiza y espera que lo sorprendas. Para mí eso es un aprendizaje, pues esperas la conexión. Se trata de seguir sorprendiendo. Eso es un espectáculo. Distancia de años, desde que grabé unas canciones sentado en mi sofá con una camarita y luego las subí a la red, a ahora, me sorprende la respuesta. Quiero seguir cumpliendo el sueño. Hay gente que tarda muchos años en llegar y yo he llegado muy rápido. Tengo la misma ilusión y las mismas ganas de seguir aprendiendo. Mi vida sigue siendo normal. Esta etapa la defino como dulce, ajetreada, de mucho trabajo y de mucho que aprender. Me han sucedido tantas cosas... y sé que debo aprovechar el momento. Se abren puertas y oportunidades, pero también hay que disfrutar de la vida. Se requiere un toque de equilibrio. No me comparo, porque sé que tengo una manera de trabajar distinta. En cuatro años cambió toda mi vida y eso es todo de todo. Ha sido radical. Ahora entiendo que hago música, pero ahora también la estoy vendiendo y eso cambia todo, respecto de antes. Debo seguir pensando que estamos aquí por la música. Es por la pasión hacia el arte.

Los boletos están disponibles en las taquillas y al 53259000.