Cancún, QR.

La muerte de Daniel Guevara Mena ocurrida esta semana durante una cirugía estética, destapó un caso más de negligencia médica a manos de seudocirujanos en las llamadas clínicas patito.

El 11 de febrero pasado, Guevara Mena –quien sufría obesidad mórbida– se puso en manos del presunto cirujano plástico Arturo Hernández Montejano, quien le practicó una liposucción inusual: le extrajo 12 litros de grasa cuando, según los especialistas, deben ser máximo seis; la falta de pericia le provocó ocho perforaciones en el intestino grueso y la intervención se complicó.

Tras dos meses de estar en coma inducido, El Chamaco Guevara falleció la mañana del martes pasado. El próximo lunes, Hernández Montejano, quien no está certificado como cirujano plástico, acumulará otra denuncia penal.

La familia de Guevara sólo espera el acta de defunción para actualizar la denuncia por lesiones a una por homicidio, anunció Roberto Andrés Acero Garavito, defensor de la víctima.

Al fallecer esta persona la averiguación previa cambia totalmente su estatus: de ser por lesiones, a partir de hoy estaríamos hablando de homicidio culposo y la Procuraduría General de Justicia del Estado (PGJE) deberá reclasificarla ante el fallecimiento del paciente, explicó el abogado.

El pasado jueves, el litigante se presentó en el hospital feneral de Cancún para solicitar una copia del expediente clínico de Guevara, de 33 años. El acusado tiene hasta ahora tres denuncias penales por otros casos, y por la muerte de Daniel sumará cuatro.

El ahora fallecido conducía en Mérida , el programa de radio Sin nombre, en la estación Retro, en el 103.1 de FM para el Sistema Rasa, luego se integró al Grupo Televisa Radio

El 11 de febrero se sometió a la cirugía en la que Hernández Montejano le extrajo 12 litros de grasa abdominal, lo que le generó complicaciones que se agravaron.

Tras la intervención, Daniel salió del consultorio, ubicado en Pabellón Caribe, por su propio pie, pero días después se sintió mal y sus familiares lo llevaron al Hospital Americano con fallas renal, cardiaca y respiratoria, y tenía lesiones en los pulmones, pero lo rechazaron porque “había tejido descompuesto que estaba infectando su organismo. Entonces fue atendido de emergencia en el hospital general de Cancún, adonde llegó con parte del abdomen en estado de descomposición.

De Cancún se lo llevaron al hospital regional de alta especialidad de Mérida, Yucatán, de mejor nivel, pero desafortunadamente perdió la batalla el martes pasado, narró el abogado.

El análisis posmortem fue hecho por integrantes del Colegio de Cirujanos Plásticos, Estéticos y Reconstructivos de Quintana Roo.

En su momento, el colegio condenó la cantidad de grasa abdominal que se sustrajo al paciente. En la situación de Guevara Mena cualquier especialista capacitado habría diagnosticado que la liposucción estaba contraindicada, pues no es para bajar de peso ni para adelgazar, es una técnica de remodelación, y los parámetros para determinar la extracción de grasa sin riesgo están plenamente estudiados.

María Eugenia Hoz Baranda, presidenta del gremio, señaló: Cada vez hay más médicos que no han cursado la especialidad de cirugía plástica... y hacen esas intervenciones sin la debida preparación; son realmente un peligro.

Ejercen la cirugía plástica para obtener dinero y no como un servicio de salud integral, es por eso que esos usurpadores sólo hacen cirugía estética y no reconstructiva. En el último año se sabe de al menos una decena de casos similares, pero no se actúa porque no se denuncian.

Al consultar el Registro Nacional de Profesionistas no aparece la cédula profesional de Hernández Mandujano como cirujano plástico. A raíz de este problema, el 3 de marzo la Comisión Federal para la Protección contra Riesgos Sanitarios (Cofepris) realizó una inspección en clínicas y consultorios de medicina estética en Cancún y Playa del Carmen. Como resultado, clausuró ocho establecimientos, entre ellos el consultorio de Juan Arturo Hernández Montejano, ubicado en Pabellón Caribe.

Álvaro Pérez, comisionado en la entidad de Operación Sanitaria de la Cofepris, dijo entonces que se revisaría que los alcances del sello de clausura consisten en que el doctor no puede brindar sus servicios en ese consultorio.

Sin embargo, hasta el viernes pasado el sello no estaba en la puerta, pues se colocó a un costado y en el consultorio hay personal agendando citas para el doctor, aunque se aclara que él ya no brinda sus servicios en ese sitio, sino en otros.

Según la PGJE, en 2013 hubo en Cancún 29 denuncias por cirugías estéticas mal practicadas; un año después 25 y en lo que va de 2015 sólo una, y no es la del caso de Daniel Guevara Mena.

“El delito está previsto en el artículo 195 del Código Penal del estado, ligado específicamente a médicos y establece una sanción o suspensión del ejercicio de la función de seis meses a tres años", explicó Carlos Arturo Álvarez Escalera, subprocurador en la Zona Norte.