Personal de varias dependencias instaló ayer en calzada Ignacio Zaragoza dos puntos de revisión de pipas distribuidoras de gas LP. Con la medida, que se aplicará aleatoriamente en toda la ciudad, autoridades del Gobierno del Distrito Federal (GDF) verificarán que los camiones-tanque, que trasladan combustible, cumplan con todas las medidas de seguridad con el fin de evitar riesgos por fugas o estallidos que pongan en peligro a los capitalinos.

A partir de las cinco de la mañana, 44 policías de la Secretaría de Seguridad Pública, personal de Protección Civil, de Movilidad y la Consejería Jurídica, realizaron las revisiones a escasos metros del Palacio de Justicia Federal, en la delegación Venustiano Carranza, y también sobre Ignacio Zaragoza, pero en la calle Amador Salazar, en Iztapalapa, donde colocaron el segundo retén de control.

Mediante el operativo de Verificación Técnica de Auto-Tanques que Transportan Gas LP en la ciudad México, que se realizó por tres horas, se reviso que las pipas contaran con la documentación reglamentaria y cumplieran con las normas de seguridad que se requieren para el manejo seguro del combustible durante el traslado.

Además de constatar que no presenten fugas, cuenten con extintores con carga vigente, señalamientos de información del combustible que transporta, el manual de procedimientos durante emergencias, los números telefónicos para reportar fugas y lineamientos establecidos en las normas oficiales mexicanas.

Durante el primer día del operativo se revisaron 38 unidades, se levantaron 29 infracciones, tres personas fueron remitidas al juzgado cívico, dos al Ministerio Público y tres pipas, que tenían diversas fallas, quedaron en resguardo.

En su cuenta de Twitter, el jefe de Gobierno del Distrito Federal, Miguel Ángel Mancera Espinosa, informó del arranque de estos operativos para seguridad de los capitalinos.

Las autoridades verificaron que los vehículos tuvieran medidas de protección civil y que estuvieran registradas en el padrón que entregó la Secretaría de Energía al GDF.

Tras la tragedia del Hospital Materno Infantil de Cuajimalpa, las autoridades buscan regular la circulación de estas unidades, que significan un peligro para la ciudadanía al trasladar combustible.