Viernes 17 de abril de 2015, p. a14
Sakhir. Bahrein. El británico Lewis Hamilton se defendió de las críticas a su conducta tras ganar el Gran Premio de China, en el que festejó rociando champán en el rostro de una modelo china. El piloto dijo que sus acciones no son nada inusual y son parte del deporte. Esta es la Fórmula Uno, el pináculo del automovilismo, y yo acababa de ganar para mi equipo
, señaló. La modelo Liu Siying, de 22 años, dijo al Shanghai Daily News que el barullo sobre el incidente era exagerado.