Martes 17 de marzo de 2015, p. 29
Más de mil habitantes de los pueblos asentados en los alrededores del río Sonora e integrantes de la sección 65 del Sindicato Nacional de Trabajadores Mineros, Metalúrgicos y Similares de la República Mexicana protestaron ayer en Cananea, Sonora, por la contaminación generada por la mina Buenavista del Cobre, de Grupo México.
Los manifestantes exigen a la empresa que pague y subsane el daño causado por el derrame de tóxicos a los ríos Bacanuchi y Sonora, en perjuicio de más de 23 mil habitantes de los municipios de Arizpe, Banámichi, Huépac, San Felipe, Baviácora, Ures y Aconchi.
Hasta la fecha, dijeron, suman más de 300 las personas que presentan diversos padecimientos luego de que reabrieron los pozos aledaños al río Sonora, que abastecen a diversas comunidades.
Demandaron la construcción de una clínica especializada, ya que desde agosto pasado –cuando fueron derramados unos 40 millones de litros de lixiviados de cobre acidulados– se han presentado enfermedades causadas por metales pesados.
Por la mañana, los inconformes recorrieron en caravana –integrada por 11 camiones y una veintena de vehículos más– los poblados cercanos al río Sonora hasta llegar a Cananea, y cortaron el suministro de uno de los pozos que surte a la minera, en la zona conocida como El Pato.
Rechazan proyecto en Oaxaca
Más de un centenar de comuneros de Oaxaca reunidos en asamblea reiteraron su rechazo a la mina que se pretende instalar en el norte del municipio de Ciudad Ixtepec, en el Istmo de Tehuantepec.
Los comuneros de la comisaría municipal manifestaron que dicho proyecto, licitado por el gobierno federal, sólo beneficiará a trasnacionales a costa de la población y el medio ambiente.
Añadieron que en junio del año pasado los comuneros analizaron el proyecto para explotar oro, plata y zinc a cielo abierto, lo que representa un riesgo para la salud de los habitantes.
José Luis Arrona Gutiérrez, comisariado de bienes comunales de Ciudad Ixtepec, indicó que han formado un bloque de comisariados ejidales, comunales y municipales de San Francisco del Mar, San Francisco Ixhuatán, Zanatepec, San Miguel y Santa María Chimalapas, así como la Unidad de Manejo Forestal, la Fundación Yansa y la cooperativa pesquera Santa Rosa, para impedir la explotación minera, que causará daños irreversibles al afluente del río Los Perros, así como a mangles y lagunas.