Cuernavaca, Mor.

El rector de Universidad Autónoma del Estado de Morelos (UAEM), Alejandro Vera Jiménez, informó que suscribió cuatro contratos con la Secretaría de Desarrollo Social (Sedesol) por 697 millones 767 mil 700 pesos, uno de los cuales fue por 396 millones, destinado a que la institución académica proveyera de vasos de plástico, platos, gorras y paliacates, entre otros objetos, a los comités del programa Cruzada Nacional contra el Hambre, que actualmente investiga la Auditoría Superior de la Federación (ASF).

El funcionario salió ayer ante los medios de comunicación para tratar de explicar la participación de la universidad en dicho programa. Uno de los contratos es revisado por la ASF, ya que la UAEM cedió sus obligaciones y derechos a varias empresas, es decir, subcontrató, y además porque no hay evidencia de que los bienes que compró llegaron a las 32 delegaciones de la Sedesol, entre otras irregularidades.

La UAEM, apuntó Vera Jiménez, firmó un convenio amplio de colaboración con la Sedesol para coadyuvar en la Cruzada contra el Hambre, realizando cierto de tipo de acciones que ellos, por su naturaleza, no tenían la posibilidad de llevar a cabo, como por ejemplo cuestiones de asesoría técnica, de distribución de ciertos insumos que necesitaban de manera extraurgente para detonar el programa y estaban completamente limitados para poder llevar a cabo estas acciones, y en ese sentido se llevó a cabo un convenio, cuatro contratos específicos; particularmente se nos está señalando uno.

La ASF investiga a la universidad porque, según el rector, “nos contrataron para entregar un serie de insumos en el ámbito nacional, y en ese sentido el convenio establecía claramente que la institución no podía ceder sus derechos y obligaciones, pero nunca decía que no podíamos subcontratar, o sea, nosotros evidentemente, pues no fabricamos platos y vasos, y entonces pues los compramos y se entregó el material requerido por la Sedesol en los tiempos y en las formas establecidos.

Asumimos la obligación hasta el último día, de hacer las entregas respectivas, y en ese sentido pues consideramos que no teníamos ningún impedimento para llevar a cabo la subcontratación (de las empresas). Tenemos la documentación probatoria de que se entregó el material, y (tenemos) las pruebas que nos van permitir solventar las observaciones una vez que nos hagan de manera oficial la notificación. Además, todas las compras de los artículos que pidió la Sedesol se hicieron por licitación.

–¿Esos recursos pasaron por la universidad?

–Siempre llegaron a la universidad y de aquí salieron bajo una licitación publica; las compras se hicieron en la UAEM y nunca cedimos nuestras obligaciones para que un tercero las hiciera. Creo que esto es lo más importante, que el dinero nunca se lo entregamos a un tercero para que éste cumpliera con nuestras obligaciones. Aquí hicimos la licitación, aquí hicimos las compras y aquí se hicieron los pagos a los proveedores.