Por vez primera, la Procuraduría Ambiental y de Ordenamiento Ambiental (PAOT) recurrirá al uso de tecnología de punta para proteger las áreas de conservación ecológica de la ciudad de México. Por medio de drones sobrevolará, por ejemplo, zonas altas de bosques y barrancas de difícil acceso para evitar que sean invadidas por construcciones y asentamientos irregulares o sean objeto de tala ilegal o tiradero de desechos.

Así lo aseguró el titular de ese organismo, Miguel Ángel Cancino Aguilar, quien detalló que se adquirieron dos drones, los cuales están ya listos para entrar en operación. Estimó que este año se incrementará el número de esos aparatos, para que coadyuven de manera más eficaz a la tarea de preservar las zonas boscosas de la capital del país.

En entrevista, remarcó que al año la ciudad de México pierde en promedio 250 hectáreas (equivalente, a 2 millones y medio de metros cuadrados) de zonas boscosas o suelo de vocación agrícola, entre otros factores por el crecimiento de la mancha urbana o el cambio de actividades en el suelo de cultivo.

Resaltó que si bien esa cifra ha ido a la baja en los años recientes, no deja de ser preocupante el asunto, y lleva a la necesidad de hacer uso de la tecnología para enfrentar de mejor manera ese problema.

Cancino Aguilar detalló que la compra de los drones se hizo con recursos federales del ramo 16, anexo 30, de la Secretaría de Medio Ambiente y Recursos Naturales (Semarnat).

El titular de la PAOT detalló que con esos drones se podrá vigilar el suelo de conservación, como bosques, cerros, barrancas y demás áreas verdes, y también ayudarán a obtener imágenes de ecosistemas y determinar su grado de afectación.

Asimismo, “nos permitirán identificar barrancas del poniente de la ciudad, a las cuales no tenemos acceso; son barrancas –dijo– que, aunque son de dominio público, están prácticamente dentro de predios privados, en las colonias Lomas Altas y Lomas de Bezares (en la delegación Cuajimalpa), y es imposible acceder a ellas si no es con el permiso de todos los dueños de los condominios que están a la orilla de la barranca”.

Con el sobrevuelo de un dron –explicó– se va a poder identificar si se está respetando en tal o cual barranca o bosque el límite de las áreas de valor ambiental; checar si no hay una construcción nueva u otro tipo de afectación.

Más adelante, detalló que el personal de la PAOT es capacitado en el manejo de dichos drones, para que en marzo próximo se pongan en operación. Añadió que cada aparato costó 320 mil pesos.