La organización civil Sin Fronteras (dedicada a la asesoría de extranjeros) aseguró que el Instituto Nacional de Migración (INM) incumplió una orden judicial en favor de dos solicitantes de asilo salvadoreños encerrados en la estación Las Agujas, en Iztapalapa.

Consultado al respecto, el organismo dependiente de la Secretaría de Gobernación dijo que Sin Fronteras no difunde datos exactos: los extranjeros mencionados solicitaron voluntariamente el retorno a su país.

Sin Fronteras afirmó que Carlos y María recibieron la protección del juez quinto de distrito en materia penal en la ciudad de México (1083/2014) para que les dieran alternativas a la detención y gestionar la salida de la estación migratoria a fin de que regularicen su situación en libertad.

El organismo no gubernamental advirtió que los dos salvadoreños huyeron de su país por amenazas de muerte de parte de una pandilla. Ellos llegaron a México el 8 de agosto del año pasado en busca de protección internacional, pero tres días después fueron detenidos por autoridades migratorias en Tapachula, Chiapas.

Enseguida solicitaron a la Comisión Mexicana de Ayuda a Refugiados el reconocimiento de esta condición. Poco más de dos meses después la comisión les notificó la negativa a su petición, bajo el argumento, explica Sin Fronteras, de que el tipo de amenaza que recibieron, así como los disparos a su domicilio, no demostraban que fuera un atentado contra sus vidas que requiriera la protección internacional.

Según los salvadoreños, en el INM los presionaron para desistirse del amparo y realizar el retorno asistido. Esta presión sicológica, aunado al encierro prolongado, ocasionó que ambos se desistieran dos días antes de que se dictara sentencia definitiva en el juicio por la privación de la libertad.