La aplicación de la Evaluación Nacional del Logro Académico en Centros Escolares (Enlace) para bachillerato se mantendrá por el resto del sexenio, informó Rodolfo Tuirán Gutiérrez, subsecretario de Educación Media Superior. La prueba continuará en su modalidad censal, por lo que todos los alumnos de tercer grado de este nivel educativo deberán presentar el examen, y las primeras modificaciones a su contenido se aplicarán en 2016.

En entrevista, luego de suscribir un convenio de colaboración con el Instituto Nacional para la Educación de los Adultos, informó que tras una revisión a la prueba Enlace para educación media superior, encabezada por el Instituto Nacional para la Evaluación de la Educación y un grupo de expertos, se determinó continuar con el examen, cuyos lineamientos específicos se emitirán en los años siguientes.

Agregó que en términos generales fue satisfactoria la evaluación, que en el caso de la educación media superior mide competencias en áreas como matemáticas, comprensión lectora y ciencia. La prueba, confirmó, sufrirá algunos ajustes sobre todo a partir de 2016, pues este año ya está en marcha y será el Centro Nacional de Evaluación para la Educación Superior el que se hará cargo del levantamiento.

Tuirán Gutiérrez destacó que la aplicación se realizará en abril próximo y continuará de forma semejante en los años siguientes, pues enfatizó que se buscará garantizar las condiciones para medir el avance en el logro educativo de los alumnos que estén por concluir su bachillerato.

Cabe señalar que Enlace para educación media superior se aplica desde 2008 a todos los jóvenes que están por egresar de ese nivel educativo, mediante una prueba estandarizada que mide su desarrollo de competencias básicas.

A diferencia de Enlace para educación básica –cuya desaparición se justificó por las autoridades educativas debido a sus efectos perversos en sus resultados y en su impacto al sistema educativo–, en bachillerato sus resultados no han estado vinculados a la entrega de estímulos a los docentes, y tampoco ha generado un impacto en el proceso de evaluación de los estudiantes en los diferentes subsistemas federales en los que se aplica.

El funcionario federal aseguró que una de las prioridades es mantener la comparabilidad de la evaluación con los resultados de otros años, a fin de contar con todos los insumos para saber cómo evoluciona el logro educativo en los planteles, pero también en la concentración que tengan de estudiantes con buenos niveles de logro o aquellos que se mantengan en escala insuficiente.