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Homéridas, obra de Ximena Escalante, plantea una visión femenina sobre el belicismo

Vuelve la arquetípica guerra de Troya
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Actores en una escena de Homéridas, que será estrenada el jueves en la sede de la Compañía Nacional de TeatroFoto Sergio Carreón Ireta/ CNT
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La actriz Yulemi Pérez Verti en la misma obra, que será estrenada el jueves en la sede de la Compañía Nacional de TeatroFoto Sergio Carreón Ireta/ CNT
 
Periódico La Jornada
Martes 3 de febrero de 2015, p. 8

Mujeres y hombres que aparecen en La Ilíada y los que viven en la época contemporánea “seguimos siendo los mismos. El puente de cientos de años que separa a una y otra sociedad no existe. A pesar de los avances tecnológicos –en la intimidad– seguimos sintiendo las mismas cosas, los mismos temores, el mismo miedo a las guerras y las masacres”, sostiene la dramaturga Ximena Escalante.

Eso se refleja en la puesta en escena Homéridas, que con dirección de Carlos Corona y un elenco de 13 actrices y un actor, se estrenará el jueves 5 en la sede de la Compañía Nacional de Teatro (CNT).

Escalante, quien ha dedicado varios años a investigar la tradición y cultura griegas, retomó algunos capítulos de las obras Troilo y Crésida, de Wiliam Shakespeare; Las troyanas, de Eurípides, y La Ilíada y La Odisea, de Homero, con la finalidad de exponer, a través de una mirada femenina, la guerra de Troya, un conflicto cuyo entramado político e íntimo sigue presente.

De acuerdo con Luis de Tavira, director artístico de la CNT: “La Ilíada de Homero nos cuenta la guerra arquetípica, la cual es capaz de explicar aquello que (Jean-Jacques) Rousseau planteó como clave para descifrar nuestra responsabilidad política”.

Ello implica, dice, reflexionar sobre el origen de la desigualdad entre los hombres y el sufrimiento social que desata la violencia en la que vivimos. Rousseau decía que el origen de la desigualdad era la guerra.

El triunfo de los más fuertes

La historia, abundó De Tavira, no es el triunfo de la razón, es el triunfo de los más fuertes, que luego han legislado para defender el interés de los vencedores. Por ello es importante volver a esa guerra arquetípica y cuestionar qué pasó ahí.

En este caso, Ximena Escalante plantea una original narración de esa guerra que sigue siendo la guerra de todos y que implica reflexionar sobre el origen de la desigualdad y nuestros sufrimientos.

Esta versión, explica la dramaturga, “parte de la riña entre las diosas Atenea, Afrodita y Eris o Érides, deidad de la discordia. Luego viene el conflicto del rapto de Elena.

“Una vez inmersos en el campo de la cruenta batalla, se desarrolla la historia escrita por Shakespeare: el mito de Trolio y Crésida.

Una historia de amor entre una rehén griega y un príncipe troyano, quienes en medio de la masacre viven su primer amor e inician su vida erótica y sexual.

Otro protagonista importante es Tersites, quien usa su fealdad y resentimientos para, entre otras cosas, desencadenar la ira de Aquiles y pervertir la vida sexual de Crésida y Elena.

Asimismo aparecen Andrómaca, Calipso, Casandra, como la gran vidente/voyerista que lo ve todo, pero nadie le cree; y Penélope, “como la gran heroína de La Odisea y como la primera atea del planeta”.

Se trata de una obra que refleja cómo los pequeños caprichos o errores desatan las grandes guerras y matanzas, explicó Escalante. El origen aquí es una vieja riña entre las diosas que están enojadas con Eris, quien por no ser invitada a una boda, en venganza lanza la famosa manzana de la discordia.

La obra refleja la mirada de esas mujeres testigos y sobrevivientes de la guerra de Troya, concluye Carlos Corona.

Homéridas se estrena este jueves a las 20 horas en Francisco Sosa 159, Coyoacán. Entrada libre, previa reservación.