México merece algo mejor, ¿cómo quién?
a revista The Economist publicó el 23 de enero el artículo El pantano mexicano
, que ha causado revuelo. Contiene una crítica severa al desempeño de Enrique Peña, la que remata con una diatriba contra AMLO. Por tratarse de una revista que vende un millón de copias por semana y ejerce gran influencia en los círculos del poder y del dinero, sus comentarios han impactado a la élite mexicana.
Vale la pena recordar que The Economist se mostró muy favorable a Peña en los primeros meses de gobierno. Le hizo una entrevista cómoda e impulsó la idea del Mexican moment: un tiempo de oportunidades para nuestro país después de décadas de mal gobierno y estancamiento. Este apoyo se hizo más sólido cuando Peña impulsó y logró, aliado con los partidos mayores, la reforma energética.
Pero conforme ha avanzado el tiempo la revista se ha vuelto más crítica. En sus editoriales reflejó la preocupación por la forma en que el crimen se salía de control. Y al fin despertó ante algo evidente, desde que Peña trabajó como gobernador del estado de México: el régimen está carcomido por la corrupción. En un primer momento, la revista cerró, piadosa, los ojos ante este hecho brutal y evidente, con tal de defender su política económica favorable a los grandes monopolios. Grave inconsistencia en una revista liberal.
The Economist ahora se muestra preocupada porque, de seguir el mal curso que llevan las cosas, el próximo presidente sería López Obrador. La revista lo descalifica como populista, mesiánico
; en esto no es muy original ni justa. Miles de veces esos epítetos han servido para demonizar a AMLO y a su movimiento. El populismo es un estilo demagógico que arrastra a la gente con promesas imposibles de cumplir. El programa de AMLO puede resumirse en 10 puntos que, examinados sin prejuicios, tendrían que aceptarse como de un reformismo moderado. Por lo que toca al carácter mesiánico, significaría la manipulación de sentimientos religiosos de las masas. Sería interesante saber cuándo AMLO ha invocado la inspiración divina. Nadie puede ser más populista que Peña, que compró 3 millones de votos, ni más mesiánico que Fox, que encabezó su gobierno con un crucifijo.
The Economist dice que necesitamos algo mejor que AMLO, ¿pero quién? En los difíciles meses que nos esperan hasta las elecciones de 2018 es posible que surjan líderes, candidatos formidables: quienes estamos a favor de la democracia les daríamos la bienvenida. Pero hoy es difícil encontrar en el pantano mexicano
otro personaje, no sólo popular con una buena ejecutoria de gobierno, sino honesto. La célebre revista no juega limpio cuando descalifica, sin un análisis crítico e inteligente, a quien hoy representa la única oposición creíble.
Twitter: @ortizpinchetti