Ajuste en el sector energético afectará a firmas como Ica, Grupo Carso y OHL: Banorte
Domingo 1º de febrero de 2015, p. 17
El recorte al gasto público del gobierno por un total de 124 mil 300 millones de pesos, en el que las dos empresas productivas del Estado, Petróleos Mexicanos (Pemex) y la Comisión Federal de Electricidad (CFE) concentran 58 por ciento del ajuste, podría tener implicaciones sobre todo en aquellas compañías de los sectores relacionados con infraestructura, así como aquellas enfocadas en participar activamente en proyectos de energía y materiales de construcción, advirtieron expertos de la Casa de Bolsa Banorte-Ixe.
Por su parte, especialistas del Banco Base consideraron que el recorte, anunciado por el gobierno el viernes pasado, llevaría a que el crecimiento económico de México fuera como máximo de 2.2 por ciento durante el año, cifra menor en un punto porcentual al piso estimado para este año por la Secretaría de Hacienda y Crédito Público (SHCP).
En tanto, analistas del grupo financiero BBVA-Bancomer señalaron que las coberturas petroleras que el gobierno contrató cubrieron 228 millones de barriles (unos 624.6 mil barriles por día), los cuales representan la exposición de los ingresos petroleros del gobierno federal a un menor precio del crudo en relación con el presupuestado, no obstante los ingresos de Pemex quedaron parcialmente descubiertos. De tal manera que en relación con la plataforma de exportación total estimada para 2015 en los Criterios Generales de Política Económica de 398 millones de barriles (un millón 90 mil 410 barriles por día), las coberturas contratadas cubren 57 por ciento de esta plataforma. Todos estos factores considerados de manera conjunta permiten que las finanzas públicas estén protegidas en 2015.
Menos alentador, escenario para 2016
Sin embargo, alertaron que el escenario para 2016 luce menos alentador
. Esto porque en ese año no existen coberturas contratadas para cubrir un menor precio del petróleo que el país exporta. De esta forma, en ese año habría un faltante de ingresos públicos para cubrir las necesidades de gasto públicos esperadas.
En su más oportuno análisis bursátil, la Casa de Bolsa Banorte-Ixe indicó que el recorte en el gasto público del gobierno y los presupuestos de inversión de Pemex y CFE podría tener implicaciones sobre todo en aquellas empresas de los sectores relacionadas con infraestructura como la constructora Ica (comandada por Bernardo Quintana Isaac); Grupo Carso (de Carlos Slim), Promotora y Operadora de Infraestructura (Pinfra) y la concesionaria de carreteras OHL (Ohlmex, comandada por José Andrés de Oteyza Fernández).
Otras compañías que podrían verse afectadas son aquellas enfocadas en participar activamente en proyectos de energía, como Alfa (encabezada por Armando Garza Sada), Grupo México (Gméxico de Germán Larrea Mota Velasco), e Infraestructura Energética Nova (Ienova lidereada por Carlos Ruiz Sacristán) y materiales de construcción como Cementos Mexicanos (Cemex, como principal Rogelio Zambrano Lozano) y Mexchem (Mexichem antes Camesa comandada por Juan Pablo del Valle) .
Los analistas comentaron que con respecto del Plan Nacional de Infraestructura (PNI), se señaló que el recorte al gasto no afectaría los proyectos de carreteras e incluso se estudiarían nuevos mecanismos e incentivos financieros para que la iniciativa privada tome una mayor participación en la inversión (por ejemplo: ampliación del plazo de las concesiones). Desde este punto de vista, Pinfra y Ohlmex podrían tomar ventaja de las nuevas condiciones.
Si bien los recortes más importantes se estarán realizando en Pemex y CFE, se espera que continué el interés por los proyectos a licitarse en la ronda uno, principalmente aquellos en aguas someras, aunque los orientados a campos maduros y terrestres también deberán irse ejerciendo, aín con los precios del petróleo en los niveles actuales.
En ese sentido, consideraron que aquellas empresas como Alfa podrán ser conservadoras en sus planes de inversión, pero seguramente seguirán interesadas en participar en las oportunidades que se desprendan. Mientras que en menor medida, el ajuste del gasto corriente del gobierno podría tener de forma indirecta cierta repercusión sobre empresas del sector de alimentos, bebidas y comercio.