Una reunión entre funcionarios federales de alto nivel y dirigentes de grupos campesinos fue suspendida ayer, luego de que algunos de los líderes sociales decidieron retirarse con el argumento de que las autoridades ampliaron la convocatoria.

El encuentro sería encabezado por el secretario de Gobernación, Miguel Ángel Osorio Chong, en momentos en que está pendiente la reforma integral para el campo, comprometida por el presidente Enrique Peña Nieto en marzo pasado.

Algunos dirigentes abandonaron el salón del hotel St. Regis de Paseo de la Reforma, donde ya estaban los secretarios de Agricultura y de Desarrollo Agrario, Territorial y Urbano (Sedatu). Dijeron que la invitación fue extendida, sin informarles, a todos los miembros del Congreso Agrario Permanente (CAP).

Habíamos pactado que estarían no más de 10 dirigentes de organizaciones, y ahorita hay más de 20; está todo el CAP. No se puede trabajar así. Acordamos que sería una reunión selecta y discreta. Que les aproveche, nos retiramos, dijo Álvaro López, de la Unión Nacional de Trabajadores Agrícolas (UNTA).

Advirtió que al gobierno le debería urgir y sentarse con toda responsabilidad con los grupos sociales, porque el horno no está para bollos. Si a lo electoral se agrega la situación de convulsión social en Guerrero, Michoacán y Tamaulipas, esto es un polvorín.

Tocó al titular de la Sedatu, Jorge Carlos Ramírez Marín, comunicar a Osorio la situación, cuando éste llegó al lugar de la cita, al volante de su camioneta. Al enterarse, el responsable de la política interna volvió al vehículo y se retiró enseguida junto con el subsecretario de Gobierno federal, Luis Enrique Miranda, quien iba en el lugar del copiloto.

Ramírez Marín dijo que seguirán insistiendo para hacer reuniones con mayor número de personas. En cuanto a la reforma, señaló que se busca avanzar en los pendientes “para ver la posibilidad de un acuerdo global…Lo revisaremos hoy y otro día”.

Antes, el secretario de Agricultura, Enrique Martínez, aseveró que el diálogo es permanente, aunque admitió que para el acuerdo con el sector agrario y agropecuario debe haber condiciones políticas y legislativas.

Dijo desconocer si habrá algún resolutivo antes de las elecciones del 7 de junio. La partida presupuestal 2015 para el campo es de poco más de 90 mil millones de pesos, precisó.