Tiempo: cuatro meses y un día de que ocurrió la desaparición de 43 normalistas de Ayotzinapa, en el municipio de Iguala.

Detenidos: 99 presuntos responsables, entre ellos 50 policías municipales de Iguala y Cocula.

Presuntos autores intelectuales: el ex alcalde igualteco José Luis Abarca Velázquez y su esposa, María de los Ángeles Pineda Villa.

Organización criminal señalada como responsable: Guerreros Unidos.

Autores materiales detenidos: cuatro; faltan otros cinco.

Declaraciones ministeriales: 386

Reconstrucción de hechos: dos.

Cateos: 16.

Objetos localizados: una bodega en la que se encontraron armas de uso exclusivo de las fuerzas armadas, incluyendo más de 54 mil cartuchos útiles de alto calibre.

Decomisos: 93 teléfonos celulares en los que se encontró información de lo ocurrido con los estudiantes los días 26 y 27 de septiembre de 2014.

Lugar de la presunta incineración: Basurero municipal de Cocula.

Número de bolsas en las que se depositaron cenizas y fragmentos de huesos de los normalistas: ocho.

Lugar donde se depositaron las bolsas con cenizas: Río San Juan.

Bolsas recuperadas con evidencias: dos.

Número de fragmentos óseos localizados en el basurero de Cocula y el río San Juan: 60 mil.

Dictámenes periciales realizados por la PGR e instituciones académicas: 400.

Especialidades de los peritajes: antropología, análisis de voz, asuntos fiscales, criminalística, contabilidad, sicología, retrato hablado, traducción, tránsito terrestre, valuación, ingeniería, arquitectura, incendios, medicina forense, topografía, audio, video, dactiloscopia y genética, fotografías aéreas y satelitales.

Resultados: el área total donde según la PGR se llevó a cabo la incineración de los estudiantes: 140 metros cuadrados, aproximadamente, en una superficie cercana a 15 por 9 metros cuadrados.

Temperatura alcanzada en la hoguera: del orden de los mil 600 grados centígrados.

Distancia entre el basurero de Cocula y la población más cercana: 8 kilómetros.

Espacio físico del basurero municipal de Cocula: una hondonada de 800 metros cuadrados, y entre 20 y 30 metros de profundidad.

Restos óseos enviados para exámenes de ADN a la Universidad de Innsbruck, Austria: 17.

Fragmentos que han arrojado positivo para identificación genética: uno.