Foxboro.

Mientras el mariscal de campo Tom Brady admitió la gravedad de las acusaciones contra Nueva Inglaterra y consideró que lo que está en juego en estos momentos es la integridad del futbol americano como deporte, el entrenador Bill Belichick salió al paso de las críticas al señalar que desconocía que se hubieran desinflado los balones durante el partido en que su equipo ganó a Indianápolis el pase al Supertazón 49.

Brady habló sobre el llamado deflated-gate, en el que Patriotas es acusado de haber desinflado ligeramente los ovoides usados en el juego contra Potros, con el fin de favorecer presuntamente su juego aéreo.

No alteré el balón de ninguna manera. No lo creo (que sea un tramposo). Nunca haría nada para romper las reglas, respondió el quarterback durante la conferencia de prensa ofrecida en las instalaciones de su equipo.

Brady comentó que luego del juego por el campeonato de la Conferencia Americana volvió a su casa a descansar y fue hasta el lunes que se enteró de lo que estaba ocurriendo y de inmediato se dio cuenta de la gravedad del asunto.

No obstante, de cara al Supertazón contra los Halcones Marinos de Seattle, a disputarse el 1º de febrero, expresó que es algo con lo que tendrán que lidiar y superar para hacer frente al juego de la mejor manera posible.

Antes, Belichick se dijo sorprendido tras conocer la noticia: Diría que he aprendido mucho más sobre este proceso en los tres últimos días de lo que sabía o de lo que hablé al respecto en los 40 años que llevo entrenando en esta liga.