Jueves 22 de enero de 2015, p. 36
Ciudad del Vaticano.
El papa Francisco corrigió sus dichos este miércoles al elogiar en público a las familias numerosas, tras la controversia suscitada por haber criticado a los católicos que procrean como conejos
.
Siento alegría de ver tantas familias numerosas que acogen a tantos niños que son dones de Dios. Todo hijo es una bendición. Decir que tener tantos es la causa de la pobreza me parece una opinión simplista
, aclaró el Papa argentino durante la audiencia general en la sala Pablo VI.
Con esas palabras, Jorge Mario Bergoglio dio una explicación a los sectores y movimientos católicos conservadores que promueven la familia numerosa, con tantos hijos como Dios les mande
, y rechazan todo tipo de anticonceptivos.
Francisco, que suele hablar con tono claro y directo, interrogado el lunes durante el vuelo papal sobre el tema del control de nacimientos y uso de anticonceptivos en un país pobre y superpoblado como Filipinas, aseguró que los católicos deben cumplir lo que llamó paternidad responsable
.
Algunos creen, perdonen la expresión, que para ser buen católico tenemos que ser como conejos
, dijo el pontífice a la prensa durante el vuelo de regreso de Sri Lanka y Filipinas, generando una ola de reacciones.
Dos días después, el Papa argentino explicó durante la audiencia en el Vaticano que la causa de la pobreza en el mundo no es el elevado número de hijos, sino un sistema económico que ha hecho que la gente se deje guiar por el dios dinero
.
Sexualidad y falsos mitos
El pontífice latinoamericano abordó en esta ocasión un tema delicado para los católicos: la sexualidad, una de las razones por las que la Iglesia pierde miles de fieles en todo el mundo.
Si bien para grupos católicos conservadores, como el Camino Neocatecumenal –algunos de ellos rechazan hasta los métodos naturales anticonceptivos–, la familia numerosa es la razón de su existencia, para otros católicos el Papa denunció un falso mito: que un buen cristiano debe tener una familia numerosa.
Para el cardenal Elio Sgreccia, de la Academia Pontificia para la Vida y experto en bioética, el Papa quiso invitar a los católicos a reflexionar sobre el principio introducido en la encíclica Humanae Vitae de Pablo VI, publicada en 1968, que si bien rechaza tajantemente la píldora anticonceptiva, insta a la maternidad y paternidad responsables
, tanto ”ante Dios como ante la sociedad”.