El andarín Éder Sánchez asegura estar en buenas condiciones físicas para conseguir los resultados que lo vuelvan a proyectar en la cúspide mundial, aunque para eso requiere del apoyo que no ha tenido en un par de años, debido a lesiones que lo marginaron de la competencia internacional, pero ahora estoy ansioso de luchar contra los mejores para ganar un lugar en 20 kilómetros.

Dice que este año será clave para su disciplina y asegura estar completamente sano para regresar con mayores bríos, aunque tendrá que recuperar el nivel deportivo y el prestigio que lo encumbraron como uno de los mejores marchistas del mundo.

Desde su participación en los Juegos Olímpicos de Londres (sexto lugar), su trayectoria ha venido en declive. De la beca de 32 mil pesos que recibía, ahora percibe sólo 12 mil y continúa entrenando asesorado por su madre, Graciela Terán. Aunque recibe críticas, dice que seguirá con ella.

Los directivos de la Conade, específicamente el área de metodología, son los que han dado al traste con nosotros, por lo que propone que así como reducen las becas a los atletas que no cumplen con las expectativas, que también les rebajen a ellos los sueldos.

Sabemos que este año es más complicado conforme se acercan los Juegos Olímpicos. Tenemos el Mundial (en China) y nos desgastan con los selectivos. Se trabaja con un proyecto (para la marcha), pero lo único que hicieron fue desintegrar los grupos, lamentó.