Puntual, como cada año, el Anuario 2014 de La Jornada ya está en circulación. Herramienta invaluable de ayuda para la memoria, esta vez su portada se engalana con una imagen de Elena Poniatowska, quien viste un traje de tehuana y su amplia sonrisa en la entrega del Premio Cervantes de Literatura, en España.

Y de ahí, lo que sigue.

En un año como éste, cuando las sombras ocultaron los significativos momentos de felicidad y gozo, esta edición del anuario abre con uno de estos últimos, porque los jornaleros celebramos en 2014 tres décadas de la fundación de nuestro diario.

A lo largo del año, particularmente en septiembre, esta casa editorial realizó diversas actividades para celebrar y agradecer a los lectores su fiel compañía, su inteligente cercanía y su acucioso y crítico seguimiento a nuestro cotidiano ejercicio periodístico.

Por ello, en las primeras páginas los editores reproducen fotografías de quienes desde las diversas áreas editoriales y de impresión laboran (o lo han hecho en otras épocas) en la elaboración de La Jornada, así como de algunos ilustres visitantes: Noam Chomsky, Eduardo Galeano, Sebastião Salgado, Evo Morales, José Saramago, el sup Marcos y Vicente Rojo, entre otros.

El anuario también reproduce reportajes, noticias, artículos editoriales, fotografías y cartones publicados a lo largo del año, los cuales fueron claves para entender e ilustrar la coyuntura de los diversos fenómenos ocurridos durante este tortuoso 2014.

La edición donde se da cuenta de estos 12 meses (diciembre de 2013 a noviembre de 2014) incluye trabajos de las secciones con las cuales se integra a diario cada ejemplar: política, economía, opinión, cultura, deportes, espectáculos, ciencia, mundo, capital, estados, y sociedad y justicia.

Después, y como es el formato acostumbrado, la edición del anuario se ocupa del registro pormenorizado de los hechos relevantes de cada mes.

En diciembre de 2013, la información se centró en la efervescencia provocada por la aprobación de la reforma constitucional en materia energética y, al iniciar el mes, la intervención quirúrgica a Andrés Manuel López Obrador a causa de un infarto al miocardio.

Enero es documentado con notas como la firma de un acuerdo entre los gobiernos federal y el de Michoacán para integrar las autodefensas a la Fuerza Rural. Resalta además el encuentro del presidente Enrique Peña Nieto con el líder de la Revolución Cubana, Fidel Castro, en La Habana.

Fue también, en el universo cultural, un mes de dolor, con el fallecimiento del caricaturista de La Jornada Manuel Ahumada, el día 3; del poeta Juan Gelman, el 13, y del escritor José Emilio Pacheco, el 26.

En febrero, la nota principal fue la captura, el día 22, del narcotraficante más buscado por la justicia: Joaquín El Chapo Guzmán Loera.

Llega marzo. Estalla el escándalo por los fraudes contra Pemex de la empresa Oceanografía. En la ciudad de México, en tanto, la nueva línea 12 del Metro suspendió la mitad de su recorrido por fallas de construcción, y la filosofía y las ciencias sociales se dolieron por la muerte, el día 5, de Luis Villoro, a los 91 años.

Abril tiene un único y gran tema: el adiós a Gabriel García Márquez.

Hacia finales de mayo, la opinión pública del país se consternó al conocer la muerte, luego de una semana de estar internado, del estudiante de secundaria Alejandro Méndez Ramírez, a quien cuatro de sus compañeros golpearon en Ciudad Victoria, Tamaulipas.

En junio, Michoacán vuelve de nuevo a los primeros planos informativos con la renuncia del gobernador Fausto Vallejo y la difusión de videos donde aparece el hijo de éste, Rodrigo, con el líder de Los caballeros templarios, Servando Gómez, La Tuta. Ese mes dio inicio el campeonato Mundial de Futbol.

Julio. De nuevo Michoacán con el desmantelamiento del albergue de Mamá Rosa, La Nueva Familia, donde cientos de jóvenes vivían en condiciones infrahumanas.

Agosto es el mes del derrame de sulfato de cobre acidulado de una mina del Grupo México sobre el río Bacanuchi, en Cananea, Sonora.

A partir de septiembre y hasta este día, las noticias se han dado sobre los casos de Tlatlaya, Ayotzinapa y la escandalosa adquisición de mansiones por la esposa del presidente Peña Nieto, Angélica Rivera, y del titular de Hacienda, Luis Videgaray, a un poderoso contratista –Higa– del gobierno federal.

La indignación social, las movilizaciones, el discurso oficial y la cauda de informaciones acerca de esos tres casos tienen desde ese mes la completa atención de la opinión pública.

El Anuario 2014 representa, por ello, un trabajo imprescindible.