El nadador tendrá que cumplir 18 meses en libertad condicional
El juez le ordenó completar su tratamiento por problemas de alcohol
Sábado 20 de diciembre de 2014, p. a15
Baltimore, Maryland.
Michael Phelps, el deportista con más títulos en la historia olímpica, se declaró culpable por conducir ebrio, casi tres meses después de ser arrestado al salir de un casino en esta ciudad.
El nadador de 29 años fue sentenciado a un año de prisión, aunque la condena quedó suspendida. En cambio, tendrá que cumplir 18 meses en libertad condicional y completar el tratamiento que ya inició por su problema con el alcohol.
El atleta con más medallas en Juegos Olímpicos (22 en total, 18 de oro) se mostró arrepentido en el tribunal y su abogado destacó los esfuerzos de Phelps por mantenerse sobrio desde su arresto. Estuvo 45 días en un centro de tratamiento en Arizona y sus médicos escribieron una carta elogiando su actitud.
El nadador también acude a reuniones de Alcohólicos Anónimos y continúa con su terapia en Maryland.
Ahora tengo las herramientas para superar esto. Lo que hice estuvo mal y cometí un gran error. Estoy entusiasmado por tener un futuro más brillante que mi pasado
, dijo Phelps al juez.
El magistrado Nathan Braverman dijo al campeón olímpico que la batalla contra el alcohol no se gana de la noche a la mañana y le advirtió sobre las consecuencias que tendría cualquier recaída.
Usted no necesita un sermón de la corte. Si todavía no entiende el mensaje, o si se le olvidó, entonces la única alternativa es la cárcel
, dijo Braverman.
Phelps fue arrestado el pasado 30 de septiembre. Según los documentos judiciales, fue detenido por conducir a exceso de velocidad y cruzar al carril contrario mientras manejaba por un túnel en Baltimore.
La policía dijo que la prueba de alcoholemia registró 0.14 por ciento de alcohol en la sangre, 0.06 por ciento por encima del límite legal en Maryland.
El oficial que intervino en la detención de Phelps escribió en su informe que lo detuvo por manejar a 135 kilómetros en una zona de 72. Escribió que percibió olor a alcohol en el vehículo y en el aliento del nadador, quien arrastraba las palabras y tenía los ojos rojos.
Phelps ya había sido detenido en Maryland hace una década, cuando tenía 19 años, por conducir ebrio. Entonces fue condenado a 18 meses de libertad condicional.
Cuando el policía pidió al atleta que se parara en una pierna, como parte de la prueba para determinar si estaba ebrio, Phelps respondió: Eso no va a pasar
. También parecía desorientado y combativo
cuando fue arrestado y pidió volver a realizar la prueba, esta vez al lado de la carretera. Al final no volvió a intentarlo y fue llevado al cuartel para ser fichado.