París.

El francés Frank Ribéry dijo que la entrega del Balón de Oro obedece más a razones políticas que deportivas, y puso como ejemplo cuando se le concedió al portugués Cristiano Ronaldo, goleador del Real Madrid.

Blatter abrazó a Cristiano y a toda su familia, que se encontraba allí. Se estaban tomando fotos y eran alrededor de 20 o 30 personas. No soy estúpido, era evidente que iba a ganarlo; no iba a llevar a toda su familia si no lo ganaba, dijo el delantero.

“Aprendí mucho en la gala del Balón de Oro. Cuando llegué, le dije a mi mujer: ‘Wahiba, vas a ver cómo pierdo’. Este año pasará lo mismo”, agregó.

Por esa razón, continuó, no se lo darán a sus compañeros en el Bayern Munich, Manuel Neuer y Arjen Robben, por sus actuaciones en el Mundial de Brasil y en el torneo alemán: “Será lo mismo este año. Manu ganó todo, es un gran tipo y no es arrogante.

Arjen ha jugado una temporada increíble en la Bundesliga y una fantástica Copa del Mundo, pero me temo que será político otra vez.

El que le otorgaron a Fabio Cannavaro en 2006, consideró Ribéry, fue porque había sido campeón con la selección italiana en el Mundial de Alemania de ese mismo año.

Para disipar sospechas de que estos señalamientos tuvieran como origen los celos, el francés lo negó pues asegura que ese reconocimiento no tiene valor.

“No echo de menos al Balón de Oro. No estoy celoso porque este premio no significa nada para mí, estoy feliz con lo que tengo en Munich. Cuando 70 aficionados gritan mi nombre en el Allianz Arena –donde juega su equipo Bayern–, puedo irme feliz a casa”, comentó.