Pese a medidas de la NFL, no se avizora solución a corto plazo
Peterson libró condena de cárcel por golpear a su hijo con una vara
Miércoles 5 de noviembre de 2014, p. a15
Troy Aikman, tres veces ganador del Supertazón, lamentó las agresiones y mal comportamiento de jugadores de la NFL en casos particulares y consideró que si bien el organismo toma medidas, no se avizora una solución a corto plazo.
La violencia doméstica es inaceptable en los deportes y en la sociedad. Es un problema que ha sido muy documentado (en el futbol americano). Es muy desafortunado
, señaló el ex mariscal de los Vaqueros de Dallas, en una conferencia que ofreció durante una visita de promoción como propietario de un restaurante temático en Satélite.
Al ser interrogado sobre los casos multiplicados de violencia de jugadores, desde las ligas de formación hasta el máximo circuito profesional, el ahora comentarista admitió el problema como un reflejo de la sociedad.
Me parece que es un poco tarde para corregirlo, pero la liga ya está haciendo lo que debe, está tomando una posición más severa al respecto
, dijo, y destacó: “Estoy agradecido de ver que la liga cambia sus políticas, se involucra en este problema con acciones para combatir la violencia. Sabemos que cualquiera vende armas, pero es importante la participación de la sociedad para tomar el mejor camino.
Es un problema difícil, no ha sido resuelto, pero la NFL lo está haciendo bien y los jugadores tienen que hacerse responsables de sus actos, a pesar de que falta un largo camino para resolverlo.
En tanto, ayer se conoció que Adrian Peterson, corredor de los Vikingos de Minnesota, evitó una condena de cárcel al llegar a un acuerdo con la fiscalía del condado texano de Montgomery, al declararse culpable de ataque imprudente contra su hijo de cuatro años, en lugar de abuso infantil, lo que le dejaría en libertad condicional y con una multa de 4 mil dólares, además de 80 horas de servicio comunitario.
Peterson, seleccionado como el mejor en su posición, fue acusado en septiembre pasado de usar una vara para golpear a su hijo a principios de este año, como acción disciplinaria en un suburbio de Houston.
La NFL le aplicó una sanción sin paga por tiempo indefinido y el jugador intenta restablecer la relación con su hijo, con quien no tenía permitido el contacto.