Informe de país
El gobierno busca contribuir a la estabilidad social e impulsar una economía basada más en el mercado
nivel razonableprevisto por el gobierno de Xi Jinping, aseguró el Buró Nacional de Estadísticas, según reportes de la agencia XinhuaFoto Ap
Martes 4 de noviembre de 2014, p. 22
El aspecto más reciente de la reforma integral que impulsa el Partido Comunista Chino (PCCh) es la creación de una gobernabilidad más basada en reglas. La sesión plenaria del comité central del partido, realizada del 20 al 23 de octubre, buscó instaurar procesos administrativos más sistemáticos y mejoras en el sistema judicial. Estas medidas podrían contribuir a la estabilidad social y facilitar esfuerzos para crear una economía basada más en el mercado, pero mucho dependerá de cómo se pongan en práctica.
La agencia estatal de noticias Xinhua emitió un comunicado al concluir la plenaria (cuarta en el actual comité central), en el que delineó las principales decisiones, enfocadas en un avance integral del estado de derecho
en el país. Las nuevas políticas no alterarán en lo fundamental el sistema político o legal, dominado por el PCCh: el propósito de las reformas propuestas es optimizar el sistema, haciéndolo más profesional, eficiente y responsable.
El tercer pleno, en noviembre de 2013, planteó un conjunto de reformas estructurales orientadas a reducir la interferencia directa del gobierno en la economía, con la mira de aumentar la productividad. Para el presidente Xi Jinping, la clave para implantar las reformas es asegurar el control del partido. Con ese fin, una campaña anticorrupción y la recién terminada campaña de educación de línea de masas (sesiones de adiestramiento de cuadros) han intentado imponer mayor disciplina en el partido y procurar la adopción efectiva de las directivas centrales. Las decisiones del cuarto pleno son una extensión de esos esfuerzos.
La dirigencia intenta institucionalizar un conjunto de procedimientos en todos los elementos del partido-Estado, como son las unidades partidistas, los órganos de gobierno y las fuerzas armadas. El partido mejorará sus reglas y mecanismos internos, a la vez que enumerará de manera más explícita los deberes y facultades de los funcionarios de gobierno.
Que entre la luz
Las reglas mejoradas tendrán poco efecto si no hay un mecanismo para verificar que se apliquen. Las reformas pretenden elevar la supervisión
en diversas áreas, pero no son explícitas en cuanto a la forma de lograrlo. Más prometedor es un esfuerzo por incrementar la transparencia gubernamental, incluso publicando una lista de facultades gubernamentales, que haga público lo que el gobierno puede hacer y lo que no, lo cual ayudaría mucho a evitar abusos de poder. Es importante que las violaciones del deber de los funcionarios estarán cada vez más sujetas al sistema de justicia penal.
No obstante, debe recordarse que esfuerzos pasados por estimular la transparencia, como obligar a los gobiernos locales a publicar presupuestos, han tenido éxito limitado. Además, es probable que la lista de facultades permanezca lo bastante vaga para dar a los funcionarios amplio margen de libertad para interpretarlas. Cambiar la mentalidad de funcionarios del Estado y el partido, acostumbrados al poder ilimitado e indiscutido, será con mucho la tarea más ardua, que probablemente llevará muchos años. Aún no está claro cuánto apoyo dará la dirigencia del PCCh a este objetivo.
Otro impulso clave a las reformas propuestas por el pleno es mejorar el sistema de justicia, baldado durante mucho tiempo por jueces mal capacitados (muchos de ellos militares retirados) y falta de independencia frente a funcionarios locales. Juicios recientes en Shanghai para centralizar los nombramientos judiciales y el financiamiento en los estratos más altos del gobierno han conseguido reducir la influencia del gobierno local en los procedimientos legales. Las reformas del cuarto pleno expandirán esos juicios; esperamos que a la larga se puedan aplicar con racionalidad. Asimismo, la Suprema Corte del Pueblo (SCP) instituirá tribunales de circuito.
La instauración de los tribunales de la SCP y la centralización del financiamiento y de los nombramientos conducirán a una judicatura más independiente. El PCCh también intenta impulsar la independencia judicial llamando a cuentas a funcionarios que intenten interferir con los procedimientos en tribunales. Las evaluaciones del desempeño de los cuadros del partido comprenderán la promoción del estado de derecho como un criterio clave.
La calidad de los jueces y otros profesionales del derecho seguirá siendo un problema. Las reformas apuntan a facilitar la contratación de jueces más calificados, pero el comunicado no es específico en este aspecto. Se espera la publicación de una explicación más detallada de las decisiones del pleno en esta semana; de todos modos, crear una judicatura más profesional es un proyecto a largo plazo.
Servir al pueblo
Las reformas esbozadas en el cuarto pleno llevan el tono populista que ha caracterizado al gobierno de Xi hasta ahora. El presidente parece muy consciente de la necesidad de recuperar la confianza de una ciudadanía cada vez más crítica del partido en años recientes. Desde que asumió el poder, en 2012, el nuevo gobierno ha intentado mostrar que el partido responde al pueblo. La campaña anticorrupción ha buscado elevar la legitimidad del partido atendiendo una de las mayores quejas del pueblo. La campaña de educación en línea de masas tiene el objetivo explícito de acercar los funcionarios a los ciudadanos.
El comunicado del cuarto pleno puso el servicio al pueblo en el corazón de las reformas. Además de la retórica idealista acerca de que la autoridad de la ley dimana del corazón del pueblo, el informe también señala que la aplicación de la ley dirigirá más recursos a campos relacionados con los intereses directos de la gente. También se mejorarán los mecanismos para incrementar la aportación del público al proceso legislativo. Esos esfuerzos exhibirán un enfoque sofisticado a la gobernabilidad, que entiende que la cooperación es una estrategia mucho más fácil que la coerción para mantener el poder.
Las reformas propuestas por el cuarto pleno ofrecen una visión para desarrollar el estado de derecho en China. Sin embargo, describir lo que debe ocurrir será mucho más fácil que darle seguimiento, en particular en un sistema tan grande y fragmentado como el de ese país. El gobierno actual ha mostrado una unidad y un sentido de propósito que estuvieron ausentes durante el anterior de Hu Jintao, y su agenda de políticas muestra un enfoque positivo en los retos más apremiantes del país. Sin embargo, aún debe probar que puede impulsar elementos claves de sus planes; el avance en los objetivos relativamente específicos delineados en noviembre de 2013 ha sido mediocre. Los cambios judiciales y regulatorios trazados en el cuarto pleno tienen mejor oportunidad de ser puestos en práctica que otras partes de la plataforma, pero el historial del gobierno a la fecha sugiere que apostar sobre este resultado sería optimista.
Economist Intelligence Unit
Traducción: Jorge Anaya
En asociación con Infoestratégica