Ofrenda por los asesinados y desaparecidos de Ayotzinapa
Sábado 1º de noviembre de 2014, p. 5
Sentados, bebiendo en una mesa de cantina y rodeados de personajes históricos disímiles y niños, conviven
los poetas Sor Juana Inés de la Cruz y Octavio Paz, quienes escuchan a la vez a tres calaveras con sus guitarras y a una serie de jóvenes que, en el mundo terrenal, claman por el regreso de los estudiantes normalistas desaparecidos de Ayotzinapa.
La majestuosa ofrenda dedicada al autor de El laberinto de la soledad en su centenario y a la escritora novohispana fue inaugurada, la noche del jueves, en la Universidad del Claustro de Sor Juana (UCSJ) con actividades que recordaron la vida y obra de Paz, así como su profundo interés por la obra de la monja jerónima.
El Altar Monumental de Muertos, que permanecerá abierto al público hasta el 21 de noviembre, fue colocado en el auditorio Divino Narciso de esa casa de estudios y es la celebración más emotiva, fuerte y conmovedora que hacemos
, dijo Sandra Lorenzano, vicerrectora de Investigación y Proyectos Creativos.
Una vez más el Claustro nos invita a recordar a los ausentes, como nuestros ancestros nos han enseñado, con colores, comida, burlas y sonrisas, lo cual todos sabemos que no nos quita el dolor ni la tristeza por los que ya no están. Dolor y tristeza hoy más presente que nunca en nuestro país.
Incluso, subrayó la escritora, nuestro Consejo Universitario decidió que los 43 normalistas de Ayotzinapa fueran nombrados también estudiantes del Claustro; son entonces, más que nunca, nuestros alumnos y compañeros
.
Inspirado en mural de Rivera
El monumental altar, dedicado al Nobel mexicano se inspira en el mural Día de Muertos (1924), de Diego Rivera, exhibido en el panel del Patio de las fiestas, en la sede de la Secretaría de Educación Pública, con varios de los arquetipos y estereotipos mexicanos plasmados por Octavio Paz en El laberinto de la soledad.
Los protagonistas son el macho, la madre abnegada, el simulador, la novia que espera, el indio, el don nadie y el pachuco, así como la mítica Chingada, la Malinche y Hernán Cortés, entre otros. Las figuras son representadas en forma de esqueletos con máscaras de sus rostros originales en la escena de la fiesta.
En el primer plano del gran altar están tres mesas: en la central, juntos, aparecen Sor Juana y Paz; a la izquierda, se observan personajes históricos de la conquista, algunos comiendo y bebiendo, como Cortés, la Malinche y Cuauhtémoc; a la derecha destacan Benito Juárez y Porfirio Diaz, al igual que varios niños que llegan a la fiesta de Día de muertos.
En segundo plano se observan más personas, como Diego Rivera, Lupe Marín, Salvador Novo y el torero Juan Silveti, así como estereotipos del rico y del pobre, el campesino y el obrero.
En el tercer plano se aprecian tres calaveras de gran formato tocando la guitarra, además de un telón de calaveras de azúcar. Del lado derecho del altar, de espaldas, está una mujer a quien no se le ve el rostro, pero sí el brazo izquierdo levantado que señala a las calaveras del fondo. Esta figura es la representación de la Chingada y aquéllas son una alegoría de los Hijos de la Chingada.
Al frente se observan una ofrenda con flores de cempasúchil, terciopelo y alcatraces, veladoras y comida típica.
A la inauguración acudieron tantas personas que abarrotaron el auditorio, luego de la espera en una larga fila para entrar, y convivieron en la tertulia con comida y bebida.
Desde hace más de 30 años, el altar de muertos en esa universidad rinde homenaje a Sor Juana para festejar sus palabras, su pensamiento y su obra, convirtiéndolo en uno de los más visitados en el Centro Histórico.
Al inicio de las actividades se presentó la edición conmemorativa Sor Juana Inés de las Cruz o las trampas de la fe, de Paz, donde participaron Carmen Beatriz López-Portillo, rectora de la UCSJ; Tomás Granados, gerente editorial del Fondo de Cultura Económica; Nuria Sanz, directora de la Unesco en México, y Sandra Lorenzano.
También fue inaugurada la muestra ¡Vámonos para Guerrero!, con 45 piezas textiles expuesta por la colección de Indumentaria Mexicana Luis Márquez Romay. En este contexto se instaló una ofrenda que rinde tributo a los asesinados y desaparecidos de la escuela Normal Rural de Ayotzinapa, como protesta ante la violencia en el país. Vivos se los llevaron, vivos los queremos
.
Los horarios de visita al Altar Monumental de Muertos son: lunes a viernes, de 10 a 18 horas (acceso por Izazaga 92, centro). Horario especial: sábado primero y domingo 2 de noviembre, de 10 a 22 horas (abierto por el Corredor Cultural de la Plaza San Jerónimo).