Luego de la nota publicada en estas páginas sobre el anuncio de la Secretaría de la Función Pública de inhabilitar 10 años para ocupar cargos públicos a Marina Stavenhagen, ex directora del Instituto Mexicano de Cinematografía (Imcine), y a Víctor Ugalde, ex secretario técnico del Fondo de Inversión y Estímulos al Cine (Fidecine) de ese instituto, el realizador y guionista aclara que desde 2009 está en proceso su caso, y que en las próximas semanas la decimoprimera sala regional metropolitana del Tribunal Federal de Justicia Fiscal y Administrativa dictaminará la resolución del tercero de los juicios que inculpaban al guionista, también acreedor a una multa de 12 millones de pesos.

Víctor Ugalde, actual presidente de la Sociedad Mexicana de Directores-Realizadores de Obras Audiovisuales, dijo: La (Secretaría de la) Función Pública emitió su sentencia en 2009 y yo empecé un recurso de revisión en términos de ley, situación que en automático suspendió la inhabilitación y la multa. Si se hubiera dado el caso de que la resolución hubiera salido negativa todavía me quedaría el recurso del juicio de amparo y sólo hasta perder este último, quedaría realmente inhabilitado. Como estoy en el juicio de revisión, no estoy inhabilitado. Si mi caso se ha retrasado es porque el Órgano Interno de Control (que impulsó la querella contra los funcionarios) lo ha retardado.

Ugalde aseveró: Esta información la he aclarado en varias ocasiones. La he desmentido y he informado que estamos en juicio, el cual se inició en el 2009. El Órgano Interno de Control del Imcine (OIC) y Función Pública dictaminan, y los ciudadanos podemos acudir a la justicia federal. En ocasiones, como ésta, las acusaciones eran injustas, producto de la persecución de José Luis Rodríguez, titular (en ese tiempo) del OIC, por no dejarme presionar para perseguir cineastas, violando la ley.

Problemas que impiden un sano desempeño

El guionista afirmó que el entonces titular del OIC quería gobernar y mandar en el Fidecine. Su obsesión era fincar responsabilidades a los productores por diversos incumplimientos a los contratos, como retraso en las fechas de estreno, en la entrega de las cintas, entre otros. Afortunadamente, las reglas de operación indicaban que el único que mandaba en Fidecine era el comité técnico. En su obsesión, de manera conjunta con la representante de Función Pública y la de Secretaria de Hacienda, decidió imponer unas reglas de operación más severas y restrictivas, lo que ha ocasionado los problemas que impiden su sano desempeño.

Abundó: Ante la resistencia del comité técnico mediante amenazas de empezar procedimientos por daños a la nación y otras mentiras, los miembros del Comité Técnico terminaron por ceder. Asimismo, por no permitir estas prácticas injustas, el OIC intentó múltiples procedimientos en mi contra y, desgraciadamente, tres llegaron hasta la Secretaria de la Función Pública. Se trata del proyecto MICINE, sobre nuevas salas de cine, y las películas Tres y El baúl de Mario.

“El de MICINE no prosperó, porque el Tribunal no aceptó las falsas acusaciones del titular del OIC, por ser falsas y estar mal fundamentadas. En el caso de Tres, explica Ugalde, “me fui a juicio y el Tribunal Federal de Justicia Fiscal y Administrativa desechó la acusación. En cuanto a El baúl de Mario, hubo un desechamiento de alegatos. Me entregan notificación. Y falta que la autoridad conteste el requerimiento solicitado. Ya venció el término y no ha contestado, pero la sentencia deberá salir de un momento a otro”.

Tanto en Tres como en El baúl de Mario, argumenta Víctor Ugalde, “la defensa fue la misma, por lo que en cualquier momento se dictará la resolución final, lo que me permite esperar que la sentencia tendrá que ser idéntica en favor de mi inocencia. Me apoyo también en que en El baúl de Mario, el OIC empezó otros casos contra otros funcionarios del Imcine y éstos ya se resolvieron en favor de los acusados y en contra de la Función Pública”.

Víctor Ugalde dijo estar tranquilo, porque este tercer juicio saldrá en ese mismo sentido. Pero lo que es irreversible es el daño a la imagen de las personas. En mi caso, estoy en un puesto de elección.