Querétaro, Qro., 7 de octubre.

El racismo es algo que duele a todos, independientemente del color, raza o país, consideró Ronaldinho, quien espera que no se vuelva a presentar.

En la primera conferencia de prensa que ofreció desde que llegó a Querétaro, efectuada en el Centro de Alto Rendimiento (Cegar), expresó: Todos estamos de acuerdo en que basta de todo eso.

Señaló que no le gusta hablar sobre el tema, pero insistió en que espera que pueda erradicarse dentro de poco.

Sobre la expresión racista que publicó en Facebook el ex funcionario municipal Carlos Treviño, el brasileño señaló que no considera interponer una denuncia formal, porque él sólo se ocupa de jugar futbol.

Reconoció que las aglomeraciones que provocan los partidos de los Gallos Blancos pueden ser molestas para algunas personas –eso fue lo que motivó el comentario xenofóbico del ex funcionario–, pero eso es lo que le gusta a él como futbolista: un estadio lleno.

Destacó la calidad del balompié nacional, el cual conoce a través de sus amigos que han jugado en este país, sobre todo porque los mexicanos, al igual que los brasileños, aman este deporte: Yo soy un jugador más que quiere hacer historia aquí.

Confió que en breve estará en mejor condición física para tener un gran nivel y dar mucha alegría a la afición del Querétaro.

Espera que los Gallos puedan ubicarse entre los ocho mejores y clasificarse a la liguilla, y después pelear para hacer algo grande.

Ronaldinho agregó que no piensa en otra cosa que no sea en el Querétaro y en la liga mexicana, además de destacar que no se arrepiente de nada porque busca hacer historia y llevar el nombre de Querétaro lo más alto que pueda.

Sin embargo, reconoció que físicamente no se encuentra del todo bien y requiere de mayor entrenamiento, pues ya tenía dos meses inactivo, además de que se le dificulta dedicarse de lleno a la preparación porque tiene partido cada martes y viernes: Hay muchas cosas diferentes, desde el balón que se juega, la altura.

Inhabilitan a Tavecchio

La Federación Italiana de Futbol (FIGC, por sus siglas en italiano) aceptó la decisión dada a conocer hoy por la UEFA, de inhabilitar a su presidente Carlo Tavecchio por declaraciones racistas realizadas en julio pasado.

En una nota, la FIGC dijo haber aceptado la medida del organismo europeo, que excluyó al dirigente de su próximo congreso, programado para el 24 de marzo de 2015 y le prohibió ocupar toda posición durante seis meses.

Además, deberá organizar un acto especial en Italia según los principios de la resolución de la UEFA, denominado El futbol europeo unido contra el racismo.

Tavecchio fue castigado porque el pasado 25 de julio dijo que los jugadores africanos eran comedores de plátanos.

“En Inglaterra identifican a los jugadores que llegan y si son profesionales les permiten jugar. Aquí tenemos a Opti Poba (nombre ficticio) que antes comía plátanos y de repente se convierte en jugador del primer equipo de la Lazio”, declaró.