Lunes 6 de octubre de 2014, p. 4
En Juchitán, Oaxaca, el sacerdote Alejandro Solalinde expresó que México es una tumba clandestina, porque todo lo enturbian y no hay claridad en la justicia mexicana
. El religioso y activista en favor de los derechos humanos se refirió a los hechos de violencia ocurridos recientemente contra normalistas de Ayotzinapa en Iguala, Guerrero.
Por otra parte, el Movimiento en Defensa del Territorio y el Derecho a la Alimentación exigió que se finquen responsabilidades penales contra el presidente municipal con licencia de Iguala, José Luis Abarca, así como autoridades estatales y elementos de seguridad pública por la desaparición de 43 estudiantes de la normal de Ayotzinapa.