No llevó voz de las víctimas a reunión de comité de la ONU
La desaparición forzada, delito de alto impacto, señala activista
Sábado 4 de octubre de 2014, p. 17
El presidente de la Comisión Nacional de los Derechos Humanos (CNDH), Raúl Plascencia Villanueva, dejó perder
la posibilidad de presentar un informe alternativo con la postura de los familiares de las víctimas ante el Comité contra la Desaparición Forzada de la Organización de Naciones Unidas (ONU) durante su séptimo periodo de sesiones, celebrado del 15 al 26 de septiembre pasados en Ginebra, Suiza, denunció Valentina Peralta Puga, integrante de la organización Eslabones.
La defensora de derechos humanos apuntó que esa omisión
habla del desinterés
del titular de la CNDH en temas que deberían ser sus prioridades, dado el cargo que ostenta.
La semana pasada se terminaron los trabajos realizados en Ginebra en el Comité contra la Desaparición Forzada, de la ONU, y Raúl Plascencia dejó perder una gran oportunidad de que la voz de las víctimas fuera escuchada ante la comunidad internacional. Él tenía un valioso instrumento que le ofrece y al que convoca el comité para presentar un informe alternativo al que presenta el Estado mexicano, y no lo hizo
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Desglosó que para elaborar ese informe el ombudsman tuvo dos años y medio; además el Estado mexicano estaba obligado, una vez que se firmó el 23 de diciembre de 2010 su participación en este comité, a exponer un informe, el cual debió presentar en 2012, pero sólo lo presentó hace unos meses y la CNDH nunca le dijo tienes pendiente ese trabajo
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Peralta Puga lamentó que Plascencia Villanueva, contra quien organizaciones civiles demandaron a la Cámara de Diputados juicio político por su deficiente desempeño
ante la CNDH, haga caso omiso de estos instrumentos valiosísimos para las víctimas
y prefiera invertir su tiempo andando en campaña
para ser ratificado para un segundo periodo al frente del organismo.
Precisó además que aunque todas las violaciones a los derechos humanos son condenables, la desaparición de personas es particularmente importante por su impacto en las familias y la sociedad.
Hay miles de violaciones a los derechos humanos, pero la peor es la desaparición de personas, inclusive peor que el homicidio, y para comprobarlo basta estar cerca de los familiares; su vida se suspende, el espacio vacío que dejan los desaparecidos se convierte en un pozo sin fondo en el que se va la vida de los padres y hermanos, la economía, la salud, se va toda la vida de la familia. Si eso no le importa al titular de la CNDH, estamos fritos
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Indicó que desafortunadamente la desaparición forzada es una práctica demasiado vigente en el país y citó por ejemplo el caso de los 43 estudiantes normalistas de Ayotzinapa, Guerrero. No hay cosa más grave que lo que está sucediendo ahora en Guerrero. ¿Será acaso que los desaparecidos no le importan a las autoridades? Estuvimos con los compañeros de estos jóvenes en el Movimiento por la Paz y nos dicen que necesitan apoyo
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