Los países emergentes podrían ser víctimas de salida de capitales, alerta Lagarde
mediocre, pero urge a crear empleos
Viernes 3 de octubre de 2014, p. 31
Washington, 2 de octubre.
La directora gerente del Fondo Monetario Internacional (FMI), Christine Lagarde, expresó el jueves el temor de que se produzca un largo periodo de crecimiento global mediocre
, ante problemas geopolíticos y riesgo de volatilidad financiera. También advirtió que países emergentes podrían ser víctimas de salidas de capitales.
Existe un riesgo de que el mundo se vea atrapado por algún tiempo en un nivel de crecimiento mediocre
, advirtió Lagarde. La economía mundial está más débil de lo que creíamos hace seis meses
, expresó.
Seis años después de la grave crisis financiera, la recuperación sigue siendo frágil, irregular y amenazada de riesgos
, señaló Lagarde, quien criticó el tibio crecimiento de la eurozona.
La responsable del FMI recordó en especial el moderado crecimiento de la zona del euro y el empantanamiento de algunos países emergentes.
Lagarde advirtió sobre reformas estructurales nacionales como respuesta a la crisis del euro. Había que tomar medidas duras. Pero ahora se trata de generar mayor crecimiento y más puestos de trabajo
, destacó.
Para impulsar el crecimiento global es necesaria una nueva dinámica
de las economías y mayor cooperación internacional, sostuvo.
Si bien se observa crecimiento, éste no es lo suficientemente fuerte como para hacer frente a los desafíos globales
, dijo. Las perspectivas para 2015 no son color de rosa, agregó, al sugerir que el FMI podría ajustar a la baja sus previsiones económicas, durante la reunión anual del FMI la próxima semana en Washington.
Las perspectivas de crecimiento mundial se han recortado
, indicó. En julio, los economistas del FMI cambiaron su pronóstico para 2014 a 3.4 por ciento, una baja de 0.3 puntos porcentuales con respecto a las perspectivas de abril.
Los países emergentes y en desarrollo han representado más de 80 por ciento del crecimiento mundial desde 2008, señaló la funcionaria. Esas mismas economías, especialmente China, es probable que continúen impulsando el crecimiento mundial, pero a un ritmo más lento que antes
, aclaró.
Aunque saludó las políticas monetarias flexibles de los grandes bancos centrales, Lagarde consideró que alimentan riesgos
sobre los mercados financieros globales.
En momentos en que el mercado está expectante ante un ajuste de tasas en Estados Unidos, Lagarde llamó a vigilar
las repercusiones sobre los países emergentes, que podrían ser víctimas de salidas de capitales. Nuestra principal tarea es ayudar a la economía mundial a poner la próxima marcha
, señaló.
Para los países más pobres, en su mayoría, las perspectivas económicas irán mejorando. Pero en muchos países, las grandes deudas de los gobiernos y el sector privado y la elevada tasa de desempleo siguen siendo los legados
de la crisis financiera de 2008.