El cortometraje se proyectará el próximo 3 de octubre en la ciudad de Cuernavaca
Ella es una mujer oceánica que representa la esperanza, tal y como lo hacían nuestros ancestros
El corto lo protagoniza por mi esposa Irma García Xochiquetzalli, pues a ambos nos agobia la manera en que personas enfermizamente egoístas dañan el medio ambiente sin remordimiento alguno, dice el cineasta. Arriba, fotograma del filme
Domingo 28 de septiembre de 2014, p. 8
Kirma la pescadora es el más reciente trabajo del cineasta mexicano Manuel Peñafiel, cortometraje en el que transporta por medio de sus encuadres cinematográficos hacia el exuberante hábitat de una hermosa pescadora llamada Kirma, personificada por Irma García Xochiquetzalli, quien con espontánea naturalidad narra su cotidiana vida sustentada con el nutritivo alimento que le brindan los peces, a los cuales atrapa con sus redes, o caen bajo la certera puntería de su arpón.
Kirma la pescadora se proyectará el próximo viernes 3 de octubre a las 19 horas en el Centro Cultural Jardín Borda, Sala Manuel M. Ponce, de la ciudad de Cuernavaca.
La belleza, el eje
En entrevista telefónica el realizador confesó las razones que lo impulsaron a realizar este cortometraje: “En el transcurso de mi carrera, diversas han sido mis manifestaciones de inconformidad; tiempo atrás mi fotografía denunció la desigualdad social que abruma a México, la pobreza fue la protagonista en mis imágenes. En la actualidad, a mis llagas temperamentales causadas por la irresoluble crisis nacional, procuro atenuarlas con el bálsamo de la hermosura, la belleza es el eje alrededor del cual gira el cortometraje Kirma la pescadora, encarnada por mi esposa Irma García Xochiquetzalli. A los dos nos agobia la manera en que muchos de nuestros paisanos han ultrajado a la ecología”.
El también fotógrafo agregó: Durante mi peregrinar como fotógrafo documentalista he visto, horrorizado, que los ríos en vez de ser cristalinos son el destino para toda clase de inmundicias, el hediondo torrente arrastra pañales, colchones, llantas, e innumerables desperdicios arrojados por personas enfermizamente egoístas, quienes lo mismo escupen en la calle, abandonan los excrementos de sus mascotas sobre la banqueta, avientan lo que les estorba por las ventanillas de sus autos, o conducen vehículos contaminantes públicos y privados; por otra parte, las industrias y compañías mineras expulsan sus desechos tóxicos sin remordimiento alguno
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El realizador continuó con su aterrador listado: Las barrancas pluviales son las arterias de México, desgraciadamente la repugnante conducta humana las mancilló con podrida irresponsabilidad. Propongo emprender una campaña a escala nacional que motive al ciudadano a no ensuciar más nuestro entorno. La quema de basura, hojarasca y campos de cultivo antes de la siembra constituyen actividades viciosamente anacrónicas que han perjudicado gravemente la calidad del aire en México, nación herida por la tala clandestina. La infame deforestación ha causado el desequilibrio pluvial, sin árboles no hay evaporación cíclica, las hermosas nubes que adornaban las alturas han huido ofendidas por la irresponsabilidad humana; esos mismos cúmulos agraviados por el desequilibrio climatológico regresan transformados en furiosas tormentas causando estragos a la población
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Ni sermones ni recriminaciones
Aunque Manuel Peñafiel precisó: “No es mi propósito dar sermones ni arrojar recriminaciones, mis palabras intentan ser un modesto vehículo hacia la reflexión, México es nuestro hogar, procuremos dar digna pulcritud. Kirma la pescadora es una mujer oceánica que representa a la esperanza. Tal y como lo hacían nuestros ancestros aborígenes. Ella agradece cotidianamente a la naturaleza y a la fauna por los dones obsequiados, hagamos lo mismo cada día de nuestras vidas, y que la profanación a la ética y al medio ambiente termine de una vez por todas”.