Se incluyen 22 profesiones que no tienen que ver
con esa área
Viernes 26 de septiembre de 2014, p. 41
Profesores y especialistas integrantes del Observatorio Filosófico de México (OFM) demandaron a la Secretaría de Educación Pública (SEP) modificar el perfil profesional solicitado en el concurso de ingreso al Servicio Profesional Docente para ocupar las plazas de profesores de lógica, ética y filosofía en educación media superior, pues se incluyen 22 formaciones universitarias que no tienen nada que ver con la filosofía
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En una carta suscrita por investigadores de las universidades Nacional Autónoma de México y Autónoma Metropolitana, así como las universidades estatales de Sinaloa, Nuevo León, Puebla, estado de México y Chiapas e integrantes de la Red de Escuelas y Facultades de Filosofía, también solicitaron a los rectores de universidades públicas aprobar una disposición que determine la prioridad para que las cátedras de filosofía las ocupen los que tengan la formación académica correspondiente
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En riesgo, futuras vocaciones
En entrevista, Gabriel Vargas Lozano, catedrático de la UAM-Iztapalapa y presidente de la comisión Teaching Philosophy de la Federación Internacional de Sociedades de Filosofía, señaló que designar como docentes de esta asignatura a los que no tienen la formación especializada pone en riesgo las futuras vocaciones en las aulas de bachillerato, y la posibilidad de alcanzar una formación filosófica de calidad
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Destacó que en la convocatoria publicada por la Subsecretaría de Educación Media Superior, que encabeza Rodolfo Tuirán Gutiérrez, el pasado 11 de abril para participar en el concurso de asignación de plazas docentes en bachillerato para el ciclo escolar 2014-2015, se incluyeron perfiles profesionales de contadores, pedagogos, veterinarios, historiadores, matemáticos, e ingenieros, entre otros.
Aseguró que el destino frecuente de los estudiantes de filosofía es la enseñanza, y si no hay un aliciente que les garantice que al menos serán considerados antes que otras profesiones para ocupar las plazas de profesores en bachillerato y licenciatura para impartir su campo de especialización, podríamos perder a muchos jóvenes que no verían futuro en esta disciplina
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En el documento se destaca que con el perfil propuesto por las autoridades se puede banalizar la enseñanza de la filosofía, desactivar su espíritu crítico o disfrazar su exclusión
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