Huyen unas 100 mil personas: ONU; premier turco admite que negoció liberación de rehenes
Lunes 22 de septiembre de 2014, p. 28
Estambul, 21 de septiembre.
El Estado Islámico (EI), la organización que desde junio se ha expandido rápidamente sobre el norte de Irak y Siria, logró estrechar hoy el cerco a Ayn Arab, pequeña localidad siria ubicada a 20 kilómetros de la frontera de Turquía, que de caer en manos de los yihadistas les dejará abierto un corredor que se extiende sobre varios cientos de kilómetros, de este a oeste, en los dos países vecinos.
Con escasa resistencia de las milicias de autodefensa kurdas y la nula intervención de las fuerzas armadas del gobierno sirio, desde el martes pasado los combatientes del Estado Islámico llenaron de banderas negras 64 pueblos que circundan Ayn Arab, conocida por los kurdos como Kobani, y propiciaron el éxodo de 70 mil personas, según el primer reporte de la Organización de Naciones Unidas sobre esta nueva crisis humana en la región, difundido hoy.
Los refugiados en el paso fronterizo turco de Mursitpinar, en el límite noroccidental de Siria, relataron que los combatientes del EI, todos vestidos de negro, destruyeron viviendas y mataron a adultos y niños, pero sólo se tiene la certeza de 11 fallecidos y se calcula que unas 800 personas no pudieron abandonar sus pueblos.
Esta es la primera vez en tres años de conflicto armado en Siria que ocurre un éxodo acelerado de 70 mil personas en dos días, cifra que según funcionarios de la ONU en Turquía podría ascender hasta 100 mil, toda vez que en la región de Ayn Arab hay aproximadamente 300 mil habitantes. La guerra civil ha causado la fuga a territorio turco de un millón 600 mil sirios.
A la zona limítrofe turco-siria han llegado cientos de jóvenes que buscan sumarse a los combates contra el EI y auxiliar a la población refugiada. Sin dar una explicación, la policía turca dispersó una manifestación de respaldo a los kurdos en Mursitpinar, punto de paso entre los dos países.
Hemos venido a denunciar a Turquía porque no permite que los jóvenes kurdos, que acompañaron a sus familias a la frontera, regresen a la región de Ayn Arab para combatir a los yihadistas
, dijo un manifestante llamado Mehmet Eminakma.
Ankara rompió relaciones con Damasco al inicio del conflicto interno sirio y en los tres últimos años se le ha recriminado al gobierno islámico conservador del primer ministro Recip Tayyip Erdogan su apoyo a las agrupaciones armadas que intentan derrocar al presidente Bashar Assad, incluido el EI, lo que ha sido desmentido por el mandatario.
Erdogan logró el sábado la liberación de 46 turcos –inicialmente se reportó la cantidad de 49– que quedaron atrapados en Mosul el 11 de junio pasado, durante la ocupación del EI. El gobernante afirmó hoy que su salida de Irak fue resultado de una negociación diplomática que no requirió del pago de rescates, aunque analistas se preguntan si hubo alguna concesión de Ankara.
Para combatir al EI, Estados Unidos convocó a una coalición de cuando menos 44 países en las dos últimas semanas. Este domingo, la embajadora estadunidense ante la ONU, Samantha Power, dijo que la fuerza aérea de su país no será la única que bombardee posiciones de los yihadistas, pero aclaró que cada país integrante de esta alianza deberá informar por sí mismo respecto del papel que tendrá en esta guerra.