Urge una política integral de prevención: expertos
Viernes 19 de septiembre de 2014, p. 48
En vísperas del Día Mundial del Alzheimer, que se conmemora el 21 de septiembre, expertos en el tema destacaron la necesidad de contar con una política integral de prevención y atención de esta enfermedad, que actualmente afecta a poco más de medio millón de mexicanos y que se prevé que para 2030 ascienda a un millón de personas.
Con la finalidad de contar con una estrategia pública, el Instituto Nacional de las Personas Adultas Mayores (Inapam), la Federación Mexicana de Alzheimer y los institutos nacionales de Geriatría, de Neurología y Neurocirugía Manuel Velasco Suárez y de Siquiatría Ramón de la Fuente, impulsan el Plan de Acción Alzheimer y otras Demencias
, precisó el geriatra Sergio Valdés y Rojas del Inapam.
En el Foro de Alzheimer, una Prioridad en Salud Pública, resaltó que la intención es que el citado plan derive en una política pública
que ponga énfasis en la prevención, diagnóstico oportuno, retraso de las manifestaciones clínicas y tratamiento integral
de esta enfermedad, lo cual debe ir acompañado de presupuesto y la creación de estancias o clínicas de día para los pacientes. Confió que en 2015 haya una estancia de día en el Distrito Federal, la cual servirá de piloto para el resto del país.
Actualmente el Alzheimer, mal crónico degenerativo que afecta al sistema nervioso central y provoca deterioro cognitivo, es uno de los tipos más comunes de demencia en el mundo, pues representa entre 50 y 60 por ciento de todos los casos.
Proyecciones médicas indican que para 2025, cerca de 22 millones de personas podrían padecer esta enfermedad, la que ahora afecta a uno de cada 10 adultos mayores de 65 años.
Ana Luisa Sosa Ortiz, experta del Instituto Nacional de Neurología y Neurocirugía, precisó que en 2010 el impacto económico de la atención de las demencias ascendió a 604 billones de dólares
a escala global y añadió que cerca de 70 por ciento de ese gasto se hace en países de Norteamérica y de Europa
, es decir en países desarrollados.
Indicó que el Banco Mundial reporta que los países de alto ingreso destinan casi 7 por ciento de su presupuesto de salud mental en la atención de las demencias, mientras que los de bajo ingreso sólo destinan 1.5 por ciento y añadió que un sondeo a escala nacional arrojó que en las áreas urbanas de México cerca de 40 por ciento de los pacientes con demencia requiere muchos cuidados, debido a lo avanzado de su mal, mientras que en las zonas rurales es de 30 por ciento.
Apuntó que en los países de bajos ingresos los mayores gastos ocurren en el cuidado informal (el que brinda la familia), y acotó que debido a ello tener pacientes con estas enfermedades genera crisis económica en los hogares
.