Proponen elevar los impuestos a la fructosa que se importa del país vecino
Miércoles 17 de septiembre de 2014, p. 24
Los productores de caña de azúcar dejarán de recibir casi mil pesos por tonelada en caso de que el gobierno mexicano no logre un acuerdo con Estados Unidos para eliminar los aranceles preliminares de 2.99 hasta 17.01 por ciento que se impusieron a las exportaciones nacionales por la presunta existencia de subsidios, dijo Carlos Blackaller Ayala, dirigente de los productores del ramo.
Es un asunto que violenta el Tratado de Libre Comercio de América del Norte (TLCAN) y que para México es más un modelo económico alrededor del cual se han desarrollado muchas actividades del país, entre ellas la industria azucarera. La determinación del gobierno estadunidense, que se funda en sus reglas internas, es inequitativa
, expuso el dirigente de la Unión Nacional de Productores de Azúcar de Caña, de la Confederación Nacional de Productores Rurales (Unpac-Cnpr).
Los cañeros, abundó en entrevista, están preocupados. “De llegarse a un acuerdo, el precio de la caña para la zafra 2014-2015 será similar al de este año –de 7 mil pesos por tonelada–, de lo contrario éste podría ser de 6 mil 300 pesos por tonelada. Por ello los productores también hemos manifestado nuestra preocupación a los secretarios de Agricultura, Ganadería, Desarrollo Rural, Pesca y Alimentación (Sagarpa), Enrique Martínez y Martínez, y de Economía, Ildefonso Guajardo”.
La postura de los cañeros, dijo, es que de proceder la demanda de los productores e industriales del azúcar estadunidenses, el gobierno de México imponga aranceles a las importaciones de fructosa, la cual además se vende entre 250 a 300 dólares por debajo del precio en el mercado estadunidense.
El 28 de marzo, industriales de la industria azucarera de Estados Unidos interpusieron dos demandas contra las importaciones de azúcar mexicana, una por subsidios y otra porque se habría vendido dicho producto a precio más bajo, es decir, habrían incurrido en dumping.
Este año, los industriales mexicanos exportaron 2.4 millones de toneladas de azúcar, de las cuales 1.9 millones de toneladas fueron colocadas en el mercado estadunidense. El TLCAN no señala un límite a las exportaciones del dulce a Estados Unidos.
A pocos días de que inicie la zafra 2014-2015, en el campo cañero existe incertidumbre. La semana pasada, los representantes de los cañeros de la Cnpr y de la Confederación Nacional Campesina se reunieron con el titular de Sagarpa para conocer el avance de las negociaciones y pidieron que el gobierno mexicano eche mano de la negociación política para llegar a un acuerdo
. En caso de que finalmente se impongan los aranceles a las exportaciones del dulce mexicano, los dirigentes cañeros se pronunciaron en favor de que México responda con una medida similar a las importaciones de fructosa y les ponga un tope
. Las importaciones del edulcorante a partir de 2012 han mostrado una tendencia a la baja, en ese año fueron de 1.7 millones de toneladas y en 2014 se estima cerrarán en 1.3 millones de toneladas.
El dirigente de la Unpac- Cnpr comentó que la producción de azúcar del ciclo que concluye se estima en 6.5 millones de toneladas –800 mil menos de las que se calcularon a su inicio–, para la zafra 2014-2015 las estimaciones preliminares son de 5.7 a 6 millones de toneladas y excedentes de entre 1.4 a 1.7 millones de toneladas, ya que el consumo nacional se mantiene en 4.3 millones de toneladas.
Comentó que los negociadores mexicanos tienen confianza en llegar a un acuerdo con Estados Unidos. “Hemos escuchado que la pretensión es que se permita a México exportar hasta un millón 600 mil toneladas de azúcar, pero los estadunidenses sólo hablan de 500 a 600 mil toneladas y bajo la condición de que se exporte azúcar cruda
, es decir, para que se refine en sus agroindustrias.
La situación es preocupante pero también hay una decisión interna de llevar a cabo un programa de impulso a la caña de azúcar para elaborar etanol, ello ante la apertura de Pemex para los biocombustibles. El anuncio, expuso, se dará en los primeros días de octubre en Veracruz.