Las medidas que ha adoptado el gobierno federal para frenar el paso de migrantes centroamericanos por territorio nacional ponen énfasis en la militarización de la frontera sur, criticó la religiosa Leticia Gutiérrez Valderrama, integrante de la organización Scalabrinianas Misión para Migrantes y Refugiados (SMR).

Entrevistada con motivo del XV Encuentro Nacional de Pastoral de Movilidad Humana, Migrantes Hacia un Mundo Mejor; construyendo la identidad del agente de pastoral, que se realizará del 16 al 19 de septiembre en Mérida, Yucatán, Gutiérrez indicó que los operativos de verificación migratoria siguen siendo fuente de preocupación para las agrupaciones defensoras de derechos, pues los agentes del ramo son acompañados por policías armados, con el riesgo que implica de que pueda ocurrir algún incidente cuando “los migrantes huyen para no ser deportados.

Esto transgrede la política de respeto a los derechos humanos y el principio que pone a la persona por encima de cualquier ley y cualquier plan, agregó.

A finales del mes pasado el gobierno federal presentó el Programa Integral Frontera Sur que incluye diversas medidas, entre ellas incrementar la velocidad del tren conocido como La Bestia, para impedir que los migrantes centroamericanos suban al tren de carga.

Al respecto, la religiosa comentó: No queremos que los migrantes vengan en tren, pues han ocurrido accidentes, pero indicó que no tienen otra alternativa para transportarse.

Indicó que los defensores de derechos han sido claros en su petición de que les dejen comprar boletos de autobús, y mientras no se permita hacerlo van a buscar otras opciones.

Apuntó que con estas acciones lo único que hacen es orillar a que las personas que dejan su país de origen viajen por rutas donde hay menos solidaridad, por lugares más hostiles. Así, las autoridades ponen a los migrantes en manos de las bandas criminales y del tráfico de personas, porque al final del día van a seguir cruzando.

Destacó que la acción no corresponde a la necesidad, ya que son personas que están saliendo (de sus lugares de origen) por cuestiones de violencia y precariedad para sobrevivir, y nosotros aquí, los detenemos con el uso de la fuerza.