La multinacional financiera Citi ve a México como un país estratégico para su expansión futura, definió Michael R. Corbat, director general del consorcio. El ejecutivo anunció este martes, ante el presidente Enrique Peña Nieto, el interés del consorcio, controlador de Banamex, por participar de los negocios que se generen a partir de la reforma energética, promulgada este año y que abrió el sector al capital privado, después de siete décadas de control estatal.

Esperamos expandir nuestro financiamiento a los sectores de energía por 130 mil millones de pesos, a través de crédito y emisiones en los mercados de capital, dijo Corbat, quien dirige el mayor grupo financiero del mundo. El directivo vino de Nueva York, donde se ubica la matriz del grupo, para participar en una ceremonia en la que Citi anunció las inversiones que realizará en México en los próximos cuatro años, el periodo que resta a la actual administración federal.

Los recursos puestos sobre la mesa funcionan en tres vertientes, explicó Corbat: Citi, a través de su filial Banamex, realizará inversiones directas por 20 mil millones de pesos en tecnología –como un centro de procesamiento de datos, ubicado en Querétaro–, con los que la institución busca proporcionar los servicios y contar con los sistemas más modernos y confiables; una segunda es la oferta de aumentar en 50 mil millones de pesos los préstamos a pequeñas y medianas empresas (pymes), dado que, expuso, los negocios de ese tamaño son la vida de cualquier economía en crecimiento y en México eso no es diferente y, la tercer vertiente, que consiste en financiar con 130 mil millones de pesos proyectos en infraestructura energética.

La transformación estructural de México abre oportunidades de negocio y crecimiento para nuestra compañía, aseguró el director general de Citi, cuya filial Banamex reconoció en febrero pasado que fue defraudada con 400 millones de dólares por Oceanografía, proveedora de servicios a Petróleos Mexicanos.

México es vital para Citi, afirmó Corbat. El país se ha convertido en la segunda base de operación más importante del mundo para el consorcio, después de Estados Unidos. La transformación estructural de México abre nuevas oportunidades de negocio y crecimiento para nuestra compañía. Citi, a través de Banamex, está lista y ansiosa de apoyar esta nueva era de crecimiento y desarrollo en México, gracias a las reformas estructurales, aseguró.

Banamex, subsidiaria de Citi, maneja una quinta parte del ahorro nacional y tiene 21 millones de clientes, expuso en la misma ceremonia Manuel Medina Mora, copresidente de Citi y presidente de Banamex.

En su oportunidad, Javier Arrigunaga, director general del Grupo Financiero Banamex, expuso que las 11 reformas estructurales procesadas en los últimos 20 meses harán más productiva y competitiva la economía, a la vez que abren una extraordinaria perspectiva de crecimiento.

Ese paquete de cambios legales incluye una reforma de la legislación del sector financiero, y que, dijo Arrigunaga, permitirá aumentar el acceso de las personas a los servicios financieros y a los bancos otorgar más crédito en mejores condiciones.

El imán energético

El anuncio de Citi de que su filial Banamex ofrecerá en los siguientes cuatro años 130 mil millones de pesos en financiamiento a proyectos energéticos es el más reciente de los planes de instituciones bancarias que operan en México para participar en el sector.

Santander México dio a conocer el mes pasado que dispone de 65 mil millones de pesos para financiar proyectos en el sector energético; a comienzos de año, Banorte anunció que trabajaría en crear un fondo de 500 millones de dólares para financiar proyectos en este sector; y HSBC también dio a conocer recientemente que dispone de 26 mil millones de pesos para préstamos a pequeñas y medianas empresas que trabajen con compañías energéticas.